La Policía Nacional ha detenido en Ciudad Real a una mujer como presunta autora de dos delitos contra los derechos de los trabajadores y otro de obligación a la prostitución. La detenida era conocedora de la situación irregular de la víctima en España y de su importante necesidad de ganar dinero, de modo que la obligó a trabajar en su negocio llegando a realizar jornadas laborales de más de 100 horas semanales y posteriormente forzándola a ejercer la prostitución en un piso de la capital.
Según la nota de prensa de la policía los hechos comenzaron cuando la víctima fue contratada como empleada de hogar interna en la casa de la hostelera. Más tarde, conociendo ya la difícil situación de la mujer, mientras sus hijos estaban en el colegio empezó a obligarla a trabajar en su bar completando jornadas inhumanas, sin recibir apenas remuneración económica y sin un solo día de descanso. Por último y según reza el comunicado policial, bajo engaños y amenazas la víctima fue obligada a prostituirse, quedándose la detenida con la totalidad de las ganancias que recibía por estos servicios.
Los hechos no han sido denunciados hasta ahora porque la acusada amenazó en reiteradas ocasiones con sacar a la luz la situación irregular de su empleada para que la deportaran de vuelta a su país. Tras el arresto de la supuesta autora, los agentes inspeccionaron el bar que regentaba, encontrando en él a otro camarero que estaba trabajando sin contrato y sin dar de alta en la Seguridad Social, por lo que se le ha imputado el segundo delito contra los derechos de los trabajadores.