Un hombre de Jerez ha sido condenado a diez años y medios de prisión por violar a su hijastra de 15 años en la casa en la que convivían. El acusado había contraído matrimonio con una mujer que tenía ya dos hijos de un matrimonio anterior, y desde 2011 convivían en el mismo domicilio familiar.
Los niños de la mujer "consideraban al acusado como su propio padre y lo llamaban papi", recoge la sentencia dictada por la Sección Octava de la Audiencia Provincial de Cádiz, ratificada por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).
Los hechos se remontan a la Navidad de 2020, cuando la familia vivía temporalmente en la casa de la madre de la mujer y, "debido al reducido espacio", una de las hijas, de 15 años, dormía en un sofá en el salón de la casa. En la madrugada del 26 de diciembre con la excusa de que tenía que levantarse temprano para trabajar, el acusado durmió con la hijastra en el sofá, aprovechando para cometer una agresión sexual con acceso carnal y prevalimiento de superioridad que se repitió durante tres noches.
El hombre fue condenado a diez años y medio de prisión por la Audiencia Provincial en una sentencia que fue recurrida por el acusado ante el TSJA manifestando su disconformidad con la prueba seguida por al tribunal que lo enjuició, asegurando que el testimonio de la menor no es fiable ni verosímil, como tampoco el de su madre.
El TSJA tras señalar, entre otras cuestiones, que el testimonio "no se presenta como prueba única, sino que viene reforzada por los datos obtenidos de otras vías probatorias externas que la complementan", como restos biológicos del acusado, ha rechazado el recurso y confirmado la sentencia de la Audiencia.