El retablo cerámico del Señor de la Oración en el Huerto de Jerez, situado en una de las fachadas del convento de Santo Domingo, tiene una curiosidad que escapa de los ojos de la gran mayoría de ciudadanos que pasan por delante de la imagen.
Uno de los azulejos, el que está situado encima de la mano izquierda del Señor, está mal colocado. Eduardo Velo hizo referencia recientemente en redes a este error que pasa desapercibido.
Hay que detenerse delante del retablo y observarlo una y otra vez para percatarse de que el azulejo se colocó de manera incorrecta.
En la imagen superior se puede ver a la izquierda el retablo original, mientras que a la derecha aparece cómo quedaría con el azulejo en su posición.