El Ayuntamiento de Arcos de la Frontera, ante la inestabilidad temporal provocada por el paso de la borrasca Nelson, ha tomado la decisión de aplazar la suelta de toros que estaba prevista para este fin de semana. Se trata del tradicional Toro del Aleluya.
El Consistorio ha explicado en un comunicado en sus redes sociales que esta decisión viene motivada por la necesidad de celebrar un espectáculo seguro, la dificultad del montaje de vallado y la repercusión económica negativa en los negocios tras una Semana Santa marcada por el mal tiempo.
Asimismo, ha señalado que el próximo lunes, 1 de abril, tras la celebración de la Junta de Gobierno Local, se indicará la próxima fecha de celebración de la suelta de toros, con la idea de repetir el mismo formato de dos toros en dos días.
Con dos heridos graves en una de sus últimas ediciones, el Partido Animalista (PACMA) condenaba estos encierros y “recrimina a la Administración la celebración de este tipo de fiestas innecesariamente peligrosas para animales y personas”, instando a su vez al Consistorio a establecer formas de ocio “sanas que no impliquen riesgos ni sufrimiento para ninguno de los participantes”.