A los 92 años de edad ha muerto Antonio Gala, uno de los grandes de las letras españolas. Poeta, dramaturgo, novelista y ensayista, Gala, que llevaba años retirado de la vida pública, ha fallecido en Córdoba.
El escritor llevaba varios días ingresado en el Hospital Reina Sofía de Córdoba por los problemas de salud de su larga lucha contra el cáncer.
Un genio al que vamos a recordar siempre con afecto. Se nos marcha Antonio Gala, Hijo Predilecto de #Andalucía y uno de los grandes poetas y dramaturgos de nuestro tiempo.
— Juanma Moreno (@JuanMa_Moreno) May 28, 2023
Tenía el corazón andaluz y un talento admirable.
Un fuerte abrazo para su familia.
Descanse en paz. pic.twitter.com/U3LnSsvCLA
El poeta vivía en la sede de su fundación en la capital cordobesa. Nacido en Brazatortas (Ciudad Real), en 1930, el autor de El manustrito carmesí o La pasión turca, tal vez su obra que en mayor medida llegó al gran público, se consideraba cordobés de adopción, de hecho era Hijo Predilecto de Andalucía.
A lo largo de su vida ha sido reconocido con distinciones como el Premio Planeta, la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes o el Premio Nacional de Teatro Calderón de la Barca. El legado literario y poético que deja es inmenso.
Gala fue un nombre clásico de la cultura española, pero también del periodismo, actividad que ejerció durante muchos años en El Mundo. El escritor cordobés no evitaba el pronunciamente político y social, de hecho apoyó públicamente el nacimiento de Izquierda Unida. En su momento, hace cosa de veinte o treinta años, también era un reconocido polemista, uno de esos nombres inevitable en debates de televisión, siempre irónico y florentino en el verbo. A veces excesivo, el escritor cordobés tampoco le hacía ascos a comentar incluso culebrones venezolanos.
Autor reconocido por la crítica y el público, sus estrenos de teatro se contaban por éxitos. Concha Velasco o Ana Belén fueron sus actrices fetiche en su época de mayor éxito de público.
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