Hace meses que resonaba lo de la noche de los Grammy Latinos en Sevilla. Una gala que siempre se había celebrado en Miami, que en horario peninsular es pura madrugada. Por eso, quizás pocos andaluces sabían de verdad cómo era una gala así. Se hablaba del glamour, o de lo que generaban los eventos paralelos. La inversión no ha sido baja, pero la Junta ya hacía balance positivo por la visibilidad que iba a suponer el evento. Sevilla es la ciudad de los eventos en los últimos años. Finales de Copa del Rey o unos Premios Goya.
Actuación completa de Rosalía en los #LatinGRAMMY celebrados en Sevilla pic.twitter.com/3vGpn6nkKR
— MOTOMAMI TOUR (@MOTOMAMlTOUR) November 16, 2023
La alfombra roja fue retransmitida por RTVE. En toda la América hispanohablante, de Estados Unidos a Argentina, por Televisa Univisión. Y hasta en redes sociales como Twitch, en abierto. La gala en sí, posterior a esa presentación, solo por televisiones privadas, pero la audiencia se cuenta por decenas de millones. Solo en Estados Unidos (el mercado que más ansía la Junta), en 2022 superó los cinco millones de personas. Aun con el cambio de horario, el impacto es importante.
Porque el acuerdo de la Junta de Andalucía no iba solo por traer a España el evento, sino que también hubo muchísimas inserciones. A diferencia de la campaña del 'Andalusian Crush', que tiró de creatividad para vender Andalucía como destino más allá de los típicos planos tomados desde el aire en edificios también típicos, esas inserciones de apenas 20 segundos durante la gala sí acudieron a ciertos clichés. Una forma más clásica de contar cada una de las ocho provincias. Probablemente, la opción más acertada y conservadora a nivel de marketing. Sin embargo, la voz locutada sobre las imágenes cayó en alguna imprecisión, como al describir las playas de Cádiz.
¡Qué bonita manera de empezar! Grande, @antoniobanderas. Nuestro mejor embajador.
— Juanma Moreno (@JuanMa_Moreno) November 16, 2023
Enamorado de #Andalucía y #Andalucía enamorada de él. Orgullo de nuestra tierra.
Arranca una gala espectacular de los #LatinGRAMMY en Sevilla. pic.twitter.com/Mx4TaaEzpj
Pero más allá de esos clips que se intercalaron en la primera parte de la gala, casi como pequeñas pausas publicitarias, la huella de Andalucía en los Grammy Latinos, y de Sevilla en particular, se encuentra en las múltiples referencias surgidas entre los artistas por su estancia esta semana en la fiesta de la música en español. En redes sociales, y en entrevistas ofrecidas antes y durante la gala.
Contó el evento con dos grandes embajadores andaluces y de Andalucía: Alejandro Sanz y Antonio Banderas. El primero, tuvo un lapsus antes de cantar su histórico Corazón Partío. Antes de cantar, daba un pequeño discurso que fue interrumpido por aplausos. Se perdió, parece, y tuvo que empezar de nuevo. Banderas dio un precioso discurso andaluz. No menos importante fue la presentadora Paz Vega, que presumió de sevillana, y que además habló en un perfecto andaluz, algo que a menudo se agradece en eventos de esta talla. También tuvo gran importancia el premio otorgado a Niña Pastori a mejor álbum flamenco, que estuvo precedido de referencias a figuras andaluzas como Morente, Paco de Lucía, Lola Flores, Carmen Amaya o Camarón. Es el premio, lógicamente, más andaluz.
La Academia Latina de la Grabación entrega por primera vez en la historia el #LatinGRAMMY al Mejor Álbum de Música Flamenca fuera de EEUU, y lo hace en #Andalucía en el Día Internacional del Flamenco. Qué orgullo.
— Juanma Moreno (@JuanMa_Moreno) November 16, 2023
¡Enhorabuena, @npastorioficial!
Te admiramos. pic.twitter.com/O81u8Dfd78
Pero fue una embajadora del flamenco andaluz quien tuvo el primer gran momento de la noche. Y no es flamenca (o al menos no ahora, habitualmente) ni andaluza. Rosalía arrancó la primera actuación con una canción de una chipionera, Rocío Jurado, y escrita por un jerezano, Manuel Alejandro. Para Se nos rompió el amor se rodeó de flamencos andaluces. Con Alfredo Lagos en una orquesta de tocaores, con palmeros como Manuel Cantarote o Carlos Grilo, montó una escena que la catalana reideó a su manera, una manera que llegó a llevar los 12 tiempos de la bulería. Hay a quien le gusta y hay a quien no. Pero sonar, sonaron las palmas por bulerías.
En la gala hubo pasión y premios. Y salsa. Porque Rosalía modificó la letra ligeramente para decirle a su expareja, el cantante Rauw Alejandro, que se les rompió el amor "de no usarlo". Éste tomó el micro un rato después y contestó con el triste Se fue de Laura Pausini. Y para salseo, Shakira, premiada a la mejor canción por su tema grabado con Bizarrap que ajustó cuentas a principios de 2023 con su ex, el futbolista Gerard Piqué. Precisamente, un futbolista, Sergio Ramos, fue quien le dio en la mano el Grammy. Aquel era uno de los importantes, justo antes de los más esperados, a Karol G (mejor álbum del año) y Natalia Lafourcade (mejor grabación).
Por alguna razón que tendrá que ver con detalles de letra pequeña del acuerdo, Andalucía fue apareciendo cada vez menos en la gala. Hubo anuncios en la emisión de La1. pero nada que ver con las citadas inserciones dentro de la gala que sí formaban parte de la emisión internacional. De hecho, las cámaras ya no enfocaron entre el público a Juanma Moreno, presidente andaluz; al consejero de Turismo, Arturo Bernal; a Jesús Aguirre, presidente del Parlamento; a Antonio Sanz, consejero de Presidencia; o a José Luis Sanz, alcalde de Sevilla. Porque en la primera hora se les vio de pasada en múltiples ocasiones, sin, eso sí, llegar a tomar protagonismo en ningún momento. Lo contrario habría sido raro.
En cuanto a detalles de la gala, lo cierto es que en algunas actuaciones hubo algunos problemas de sonido en la emisión. No, no era cosa de su tele, si usted también lo notó. Fue algo más general en algunas actuaciones. Cosas que pasan y que no eclipsaron una gala curiosa, con muchísima música y que acabó llegada la madrugada. Cuatro horas desde el inicio de la emisión televisiva, tres horas de gala andaluza para el mundo.
Comentarios