Pocas veces un libro provoca más efecto que la relación entre autores y lectores. El caso de El mañana está en nuestras manos parece una de estas excepciones. Esta obra, publicada este 2024 por medio centenar de profesores, profesionales y activistas tendrá vida, en forma de encuentros, más allá de la letra impresa.
A partir del próximo miércoles 11 de diciembre, este conjunto de ensayos y reflexiones -que agrupó a firmas como Teresa Rodríguez, Daniel López Marijuán, Marcelino Porquicho o Juan José Tamayo, entre otras decenas de participantes- toma forma de tertulias y coloquios abiertos al público, con periodicidad mensual.
La primera cita está fijada el segundo miércoles de diciembre a las 18.30 horas en el espacio Amigos de Quiñones, antigua sede del Rectorado en la calle Ancha de Cadiz. El título del primer encuentro es El Derecho a la Rebelión. Refundación de las Naciones Unidas.
Este primer encuentro estará presentado por Lola San Isidro, maestra y defensora de los Derechos Humanos. Moderará Pedro Castilla Madriñán. El punto de partida de los debates será el mismo que formaba la premisa de El mañana está en nuestras manos: "La verdadera grave realidad mundial que acucia al planeta y a las personas".
Los organizadores afirman que "es una iniciativa que surge de Cádiz, ante los alarmantes y graves acontecimientos que se están sucediendo en el mundo, las escandalosas desigualdades que provocan la muerte diaria de 20.000 personas por hambre, las ascendentes guerras como solución de los conflictos y la amenaza nuclear"
Entre las preocupaciones que formarán parte de las distintas convocatorias temáticas también aparecen "el preocupante cambio climático, la pérdida de la democracia y el resurgir de un siniestro poder en la sombra, propietario de grandes métodos de comunicación".
De los 50 autores que colaboraron en el libro, 21 son originarios de la Bahía de Cádiz. El resto residen en Sevilla, Granada, Córdoba, Málaga, Huelva, Madrid, Zaragoza, Valencia o Cantabria. "Todas son personas ilustradas y comprometidas con la sociedad, muy preocupadas por el triste legado que heredarán nuestros nietos, las generaciones venideras"
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