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Malestar y preocupación en uno de los clubes de fútbol activos más antiguos de la provincia de Cádiz. El Puerto Real Club de Fútbol, que iba a celebrar su próximo encuentro correspondiente a la Jornada 12 de la Primera División Andaluza contra el Arcos, ha suspendido el partido que iba a tener lugar este domingo 11 de diciembre a las 16:30 horas en el campo de fútbol Virgen del Carmen. Aficionados del club verdiblanco y de otros de la provincia, desde Cádiz capital, a Jerez, pasando por localidades de La Janda y la Sierra, han mostrado sus condolencias a futbolistas y seguidores de este histórico, fundado en 1931 y que está al borde de la desaparición.
La entidad culpa al Ayuntamiento de Puerto Real de su situación económica por el dinero que se le debe al no haber salido adelante la operación de Entrevías, con la que el club podría haber salido beneficiado y de la que sin embargo salió bastante perjudicado, ya que perdió el antiguo campo Sancho Dávila. El club que preside ahora Antonio Bohórquez se quedó sin nada y reclama al consistorio de esta localidad 9,3 millones de euros por aquella venta para un proyecto que quedó en saco roto desde 2006.
El actual equipo de gobierno de la Confleuncia de Izquierdas en palabras del concejal de Urbanismo, José Antonio Montilla, dice que le ha ofrecido la antigua parcela al club, donde se puede construir viviendas y espacios comerciales, y una posible construcción de un campo de fútbol en Entrevías, pero tampoco olvida que en "estos años" la aportación de dinero público a la entidad ha alcanzado los tres millones de euros.
"La realidad que debe conocer la ciudadanía, es que Epsuvi y el club firmaron diferentes convenios y adendas con la dificultad de que el último convenio firmado y reconocido por el Ayuntamiento, el del año 2012, ha sido recurrido por el club ante los tribunales, reclamando que no es válido y que se debe volver al de 2010, cuestión que se deberá resolver judicialmente, entre otras cosas porque hay entre ambos convenios diferencias económicas muy significativas", dice el concejal en un comunicado municipal. Ese recurso del club ha imposibilitado que que el club reciba financiación y habla de que el proceso de Enrevías es una "oportunidad de mejora para todas las partes" ya que motivaría tanto la creación de un centro comercial que "dinamice la actividad económica y social con nuevas viviendas sociales" como un nuevo estadio de fútbol.
Sin embargo, la crisis económica acsabó con aquel sueño, enquilosado desde años sin solución y atrapada por la situación hipotecaria de Epsuvi y del propio Puerto Real CF. "Hay que recordar que el presidente no firmó por consejo de sus abogados. Queremos alcanzar la mejor solución para todos pero es necesario un acuerdo donde se abandonen posturas extremas. La solución para el día a día del club pasa porque el presidente acepte el pago de las partidas que se aprobaron en el último convenio y que no se realicen por no ser aceptadas por el club", dice el edil. La sentencia del juzgado de lo mercantil número 1 de Cádiz invita a abrir el proceso de liquidación y pagar las deudas de su concurso de acreedores, unos 3,5 millones de euros.
Ante esta compleja y problemática situación, la posible desaparición de este histórico está más cerca que nunca. El partido se ha suspendido tras varios impagod a los árbitros, por lo que el Puerto Real CF tiene 72 horas de plazo para abonar estos honorarios. En caso contrario, el club dejaría de competir y perdería la categoría, siendo aún más incierto su futuro.
En una rueda de prensa de hace tan solo dos semanas, cuerpo técnico y plantilla respaldaron la decisión de abandonar la competición ante la falta de recursos y expesaban ssentirse "solos y sin posibilidad de seguir competiendo", ya que el dinero para entrenar como para competir "sale de nuestros bolsillos". Algunos de los futbolistas del equipo, que son de otras localidades como Medina, Jerez, Arcos y San Fernando, llevan semanas sin dinero, haciendo frente a los gastos de desplazamiento por ellos mismos y sin lo básico, como botiquines para curas. El club llama al Ayuntamiento de Puerto Real y a la ciudadanía a buscar una solución, ya que insiste, se le debe 9 millones de euros tras una operación urbanística no resuelta hace casi 20 años con la que está al borde del abismo.