Al menos tres responsables de la RFEF coaccionaron presuntamente a Jenni Hermoso para que justificar el beso de Rubiales a la jugadora durante la entrega de medallas del Mundial de fútbol femenino.
Durante su declaración en la Audiencia Nacional, el expresidente de la RFEF fue preguntado por "tres o cuatro nombres" de su entorno profesional que, según las acusaciones de la Fiscalía, coaccionaron junto a Rubiales tanto a la futboilsta como a su familia y amigos.
Hermoso, en su declaración ante la Fiscalía, calificó de “hostigamiento” la actitud del motrileño y de los miembros federativos. La Fiscalía y la abogada de la jugadora están estudiando la posibilidad de solicitar al juez la declaración como imputados de estos trabajadores de la RFEF.
"Todo el país ha podido observar cómo no existía ningún tipo de consentimiento", ha señalado la abogada de la jugadora, que ha hablado también del estado de Jenni: "Se encuentra afectada tanto por los hechos como por la humillación".
De manera preventiva, mientras que duren las diligencias de este caso, Rubiales no podrá comunicarse ni acercarse a menos de 200 metros de la internacional española.
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