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La espiral de violencia vinculada al fútbol por la rivalidad entre los dos Xerez ha llevado a la alcaldesa de la ciudad a tomar cartas en el asunto. Las últimas semanas han tensado más la cuerda entre aficionados de ambos equipos. Tras el derbi de hace dos semanas, dos socios del Xerez Deportivo FC fueron agredidos.
La guerra en redes sociales también se ha llevado durante las pasadas fiestas navideñas a las calles de la ciudad, con cánticos y ofensas en alguna que otra Zambomba y con insultos hacia la carroza del Xerez Genuine, equipo inclusivo del Xerez DFC, en la Cabalgata de Reyes Magos.
A este incidente se han sumado el intercambio de pintadas. Por un lado, en la vivienda y la empresa de un socio del Xerez CD han aparecido mensajes de "el respeto se gana con respeto", mientras que la sede social del Xerez DFC ha amanecido con el mensaje: "Se acabó el juego".
La intervención de las instituciones y de las directivas de ambos clubes se antoja necesaria tras los últimos acontecimientos. Y, en este sentido, María José García-Pelayo ha convocado a los presidentes de las dos entidades para tratar de encontrar un punto en común y poder firmar una tregua para que la violencia no vaya a más.
La reunión de la alcaldesa de Jerez con Sebastián Alonso de Medina, presidente del Xerez DFC, y Juan Luis Gil, máximo dirigente del Xerez CD, está prevista para la tarde de este jueves en el Ayuntamiento.
Todas las partes deberían poner un poco de su parte para calmar una situación que no beneficia ni a la ciudad ni al fútbol de Jerez.
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