Un pleno municipal extraordinario sirvió este primer miércoles de noviembre de 2024 para aprobar una operación urbanística extraordinaria. En otra ciudad sería una gestión media, relativamente importante, pero las circunstancias de Cádiz la convierten en excepcional.
Con el término municipal más pequeño de las capitales de provincia españolas (apenas nueve kilómetros cuadrados con la mitad protegidos como parque natural) un terreno -que sería común en otro territorio- se convierte en inusual. De hecho, es la mayor operación urbanística desde que Cádiz ganara el suelo sobrante de Astilleros Españoles entre 1995 y 2000.
En aquel entonces, ese paso supuso la creación de un nuevo barrio (conocido como Astilleros) con viviendas para casi 5.000 residentes con el añadido la construcción del centro comercial El Corte Inglés y la creación de la nueva casa cuartel de la Guardia Civil. Para ubicar las cifras, conviene recordar que Cádiz tiene ya sólo 113.000 habitantes.
Ese contexto previo convierte la operación aprobada ahora en la más trascendente en 25 años porque supone la creación de un pequeño nuevo barrio en una ciudad relativamente ahogada por el mar a pesar de sus solares y edificios vacíos.
La importancia de la operación queda en evidencia con los votos favorables de los tres partidos presentes en el pleno municipal de Ayuntamiento: PP, PSOE y Adelante Izquierda Gaditana. Todos levantaron la mano para apoyar y hablaron de "un gran día, un gran paso" para aprobar el Plan de Reforma Interior (PRI) ARI-ZF-01 Zona Franca-Loreto.
Traducido a lenguaje común, esas siglas suponen la liberación de la parcela de la antigua y derruida factoría de hélices y piezas navales Navalips. Son 10.000 metros cuadrados en los que se van a levantar 800 viviendas. La mitad serán protegidas y el resto de renta libre. En total, la previsión es que acoja a unos 2.000 nuevos vecinos en total.
El alcalde, Bruno García, destaca la importancia de la colaboración institucional, de la alianza y del diálogo entre administraciones para hacer posible "este proyecto de ciudad" asegurando que "esta reordenación nos afecta a todos, tanto al Ayuntamiento de Cádiz, como a la Junta de Andalucía y al Gobierno".
"Hemos dado un paso muy positivo e importante, ya que abrimos un camino para construir más viviendas en nuestra ciudad. Es un gran ejemplo de cómo las instituciones, entidades, administraciones y organizaciones desde el consenso y la colaboración pueden generar grandes beneficios para la ciudadanía".
El proyecto de Navalips es una actuación promovida por Zona Franca y Sepides, organismo público dependiente del Ministerio de Hacienda. Tras la firma de un protocolo de desarrollo urbanístico entre Zona Franca, Sepides y Ayuntamiento hace 18 meses, la aprobación plenaria supone el siguiente y definitivo paso hacia las obras.
El proyecto permite romper una de las barreras urbanísticas, formada por naves industriales y solares inutilizados, que separan el recinto industrial de barrios como Loreto y La Laguna. "Introducirá espacios libres de calidad y conectados" para crear "continuidad urbana con los espacios colindantes, mejorar y diversificar la oferta residencial de la ciudad".