El nombre del establecimiento ya es una declaración de intenciones: La Lectora. Tenía que suceder. Este 11 de diciembre celebraba "la puesta de largo" como librería aunque acumula más de seis años como cafetería de gran éxito en plena calle Ancha de Cádiz.
Esta nueva función híbrida y complementaria está en marcha hace casi dos meses y en enero de 2025 vivirá unas pequeñas reformas. Más allá de fechas o detalles prosaicos está la poesía y la vocacación de amor por los libros.
Los culpables del cambio son Loly Corral e Iván Cano. Juntos han puesto en marcha la segunda cafetería-librería de Cádiz tras el éxito de la veterana, cercana y celebrada La Clandestina (calle José del Toro).
Ella ya fue librera durante diez años en su pueblo natal de Almería. Él lleva años de trayectoria como editor, cofundador del icónico sello gráfico Calvichi's y autor de Carnaval de Cádiz para niños o Cádiz, descubre la ciudad con la guía turística infantil.
Su propósito común es convertir La Lectora en un "centro cultural, un espacio con programación estable, varias citas al mes, lecturas poéticas, presentaciones", adelanta Cano.
Todo el local tiene cierto aire de galería, con pinturas y dibujos de artistas que rotaron y rotarán, con sus obras expuestas en el ancho pasillo que lo forma. Agendas, libretas, lápices, láminas o tazas aparecen como complementos a la venta o a la vista en mesas y estantes. Siempre con la literatura y el arte como temática.
La Lectora, antes de mutar en librería, siempre tuvo libros a mano para ceder a los usuarios de la cafetería, para servir letras y lecturas a los consumidores de bebidas calientes, meriendas y desayunos.
Ahora, ese pequeño servicio se amplía con tienda al fondo, con "catálogo propio, recomendaciones y distribución para los compradores". La evolución natural y sentimental de dos partidarios de la lectura.
Eugenia Montenegro comparte con Iván Cano las tareas de asesoramiento y venta en la nueva zona de tienda, al fondo de la librería La Lectora. La cafetería cuenta con cinco trabajadoras.
"Queremos que sea un punto de encuentro, quizás con dos citas por semana pero iremos comunicando la programación en redes sociales", afirma Iván Cano.
Mientras llegan unas pequeñas reformas, un cambio de aspecto, en la última semana de enero de 2025, La Lectora suma a su carta -también un homenaje literario con un formato sorprendente- la recomendación y venta de libros. Se hace, también, librera.
La cafetería mantendrá su horario de 9 a 21 horas. La zona de librería tiene uno algo más limitado y comercial: de 10 a 13 y de 17 a 20 horas. En ambos casos, de lunes a domingo sin excepción.
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