Aguas de Cádiz y Universidad de Cádiz firmaron un convenio para la investigación de la calidad de las aguas y las posibles causas de la pérdida de la bandera azul en la playa de La Caleta la temporada 2022, que recuperó este año, con el fin de poder determinar las circunstancias por las que algunas muestras, en determinadas ocasiones, dieron como resultado notable alto y no el sobresaliente al que estamos acostumbrados.
Aunque en los últimos cuatro años tan solo tres muestras han pasado de sobresaliente a notable, siempre con calidad buena para el baño, el compromiso de la Delegación de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Cádiz y de Aguas de Cádiz con la ciudad era "esclarecer las posibles causas que no permitieron obtener el reconocimiento de bandera azul a esta playa tan emblemática de la ciudad la pasada temporada".
Para ello, sostienen, se firmó un acuerdo de colaboración con la UCA, concretamente con sus departamentos de Física Aplicada y de Tecnologías del Medio Ambiente que han desarrollado un estudio de comportamiento, posible deriva y trayectoria de los contaminantes que pudieran ser vertidos en distintos puntos de la costa y que, teniendo en cuenta las peculiaridades físicas de la playa y otros condicionantes como las corrientes, mareas y diferentes situaciones de viento, pudieran llegar a la playa de la Caleta.
El equipo de profesionales implicados en el estudio ha implementado un modelo hidrodinámico que simula las corrientes ya sean debidas al viento o a la marea, que son los principales mecanismos generadores de corrientes en esta zona. Así, se ha realizado una batimetría detallada de la zona de estudio y topografía de la línea de Costa, se han señalado los condicionantes iniciales en los que se ha tenido en cuenta los valores de temperatura, salinidad y corriente en los puntos de toma de muestras. Además, se han recogido datos de viento medido a 10 metros de altura (velocidad y dirección), presión atmosférica y los coeficientes de marea, habiéndose simulado las barreras físicas existentes y nodulizado la rugosidad del fondo marino.
Una vez validado el modelo hidrodinámico se realizó el estudio de dispersión de contaminantes de forma que se pueda conocer el origen de un vertido o determinar un destino al cabo de un tiempo determinado. El modelo que se ha elegido es el DELFT 3D-FLOW por su versatilidad ya que permite realizar tanto simulaciones hidrodinámicas (por el estudio de corrientes) como transporte (sedimento, contaminación, material disuelto, descarga de aguas residuales, etcétera), tanto en 2D como en 3D. Este modelo está diseñado para realizar estudios multidisciplinares en zonas costeras, ríos y estuarios, por lo que se considera el más apropiado para la playa de La Caleta.
Con el modelo ya configurado con todas las peculiaridades del estudio, se realizaron diversas simulaciones teniendo en cuenta los parámetros microbiológicos y químicos de las diferentes muestras tomadas previamente, para poder obtener conclusiones sobre las posibles causas de la pequeña contaminación detectada.
A la vista de los resultados obtenidos, han extraido como conclusión que "las corrientes en el canal de La Caleta circulan hacia costa en marea alta y hacia mar abierto en marea baja, paralelas al propio canal. Su intensidad en esa zona es débil, oscilando entre 0.00028 – 0.034 m/s según el modelo y entre 0.00023 – 0.048 m/s según el correntímetro, correspondiendo los valores mínimos a mareas muertas y los máximos a mareas vivas".
En segundo lugar, subrayan, "los resultados del modelo hidrodinámico indican que la renovación del agua en la zona de interés (canal de La Caleta) es limitada, estando principalmente controlada por la dinámica mareal, con poca influencia del viento". Además, los bajos rocosos limitan el intercambio de agua con el exterior, dada su elevación y extensión. Por otr olado, las trayectorias seguidas por las boyas virtuales sugieren que las posibles fuentes de contaminación en el canal de La Caleta deben ser locales, no habiéndose observado la entrada en dicha zona de las boyas lanzadas en el exterior (EBAR de Lubet, Santa María del Mar, Campo del Sur o zona sur del Parque Genovés) tras 24 o 48 horas de simulación.
"Con levantes intensos, un vertido procedente de la EBAR de Lubet podría suponer un riesgo medio-bajo de entrada de contaminación hacia el canal de La Caleta. No obstante, teniendo en cuenta que los levantes intensos no coinciden con periodos de lluvias, dicho riesgo se reduce", explican en el comunicado.
Las simulaciones sugieren que los valores elevados de enterococos encontrados en el punto 3 de muestreo necesariamente proceden de una fuente local cercana.
Cabe resaltar que las Estaciones de Bombeo de Lubet o Mirandilla solo pueden verter en determinadas circunstancias cuando hay lluvias torrenciales. Estos vertidos son autorizados por la Junta de Andalucía y quedan registrados, por lo que se pudo comprobar que no se realizó vertido alguno en las fechas de las recogidas de muestras.
Este estudio, reconocen, ha sido "enriquecedor para ambas partes" ya que ha permitido "ampliar el conocimiento y la experiencia en materia de implementación de modelos hidrodinámicos con dispersión de contaminantes, lo que constituye un objetivo de gran interés para ambas entidades".