Chiringuitour SL, empresa concesionaria para la ocupación y explotación de ocho locales y terraza anexa en el Paseo Almirante Pascual Pery Junquera invertirá más de dos millones de euros en la creación de una nueva zona de ocio, esparcimiento y restauración en este espacio tal y como adelantó lavozdelsur.es
El detalle del proyecto, que ya ha superado la tramitación administrativa, ha sido presentado por los promotores a la presidenta de la Autoridad Portuaria. Los empresarios participantes -Raúl Cueto, Omar García Osuna y la firma valenciana The Music Republic- se han reunido con la propia Teófila Martínez, y una delegación de representantes municipales encabezada por el alcalde de la ciudad, Bruno García de León.
Ocho locales y terraza superior
El espacio de actuación se concreta en dos agrupaciones de los ocho locales vacantes en la zona; en concreto, los módulos B, C y D por un lado y los módulos H, I, J, K y L por otro lado, a los que se unen espacios exteriores de porches y terraza superior.
En total, se parte de una superficie construida de 2.048 metros cuadrados, a los que se suman otros 2.500 metros cuadrados de espacios exteriores.
El objetivo, según plantean los promotores, “es la implantación de una actividad de ocio y restauración con horario amplio que dote de dinamismo al espacio singular”.
Los promotores plantean una "actividad de ocio y restauración de horario amplio", es decir, diurno
Para ello, el proyecto busca diseñar un espacio libre en la terraza superior -actual botellódromo- como hito de ocio y restauración dentro del recorrido peatonal del Paseo y garantiza la continuación del paseo perimetral de borde marítimo, reforzándolo con un paseo mirador superior que no dependa de horarios de actividad y que permita una conexión futura con la muralla histórica.
La propuesta de actividad de ocio y hostelería plantea diversidad de actividades, desde la restauración y la hostelería hasta espectáculos.
Conexión con el mar y el casco antiguo
Para ello se plantea la cubrición de la crujía exterior de acceso a los locales a modo de porche de forma que se consigue ampliar la anchura de la terraza superior. En esta banda se proyectan los núcleos de escaleras y ascensores que comunican los dos niveles del complejo; el nivel inferior dedicado a salas de fiestas cerradas y aseos, mientras que el nivel superior se destina a actividades de ocio y restauración al aire libre.
La idea principal de proyecto es conseguir que los locales existentes recuperen soleamiento y vistas hacia la ciudad a la vez que se dota de actividad un espacio exterior que hasta el momento se encuentra infrautilizado a pesar de poseer unas condiciones de orientación y elevación notables.
El proyecto plantea la puesta en valor de las condiciones naturales de la ubicación y sus posibilidades de conexión con el mar y la ciudad histórica.
Teófila Martínez: "El proyecto coincide con el concepto de espacio que tenemos para la Punta de San Felipe"
El edificio sobre el que se actúa está situado en el Paseo Almirante Pascual Pery, sobre suelo portuario, en la prolongación de la muralla de San Felipe, y está formado por la agrupación de locales de ocio inaugurada en 1993 en la Punta de San Felipe.
Se trata de una sucesión de pórticos separados cuatro metros que compone la agrupación de locales y que finaliza al Norte con un espacio de anfiteatro semicircular, en uso actualmente y con el nombre comercial de Momart.
Inexplicable para Teófila Martínez
Estos locales se explotan mediante concesiones administrativas otorgadas por la Autoridad Portuaria, que persigue también generar un nuevo concepto de ocio en este espacio, alejado de la conflictividad y que será la punta de lanza de la integración del puerto en la ciudad en esta zona.
Para la presidenta de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz, “el proyecto coincide con el concepto de espacio que tenemos para la Punta de San Felipe, que debe convertirse en elemento tractor para este espacio de oportunidad para la ciudad y su entorno”.
Para Teófila Martínez no era explicable que una de las zonas con mejores vistas de la ciudad no tuviera un mirador desde el que los ciudadanos puedan contemplar la fachada marítima de la Alameda.