En los últimos años, afortunadamente, la mujer ha ido ganando presencia en el Carnaval de Cádiz, rompiendo con el dominio histórico de las agrupaciones masculinas y abriendo nuevos caminos.
El auge de los movimientos feministas y la reivindicación de una mayor visibilidad femenina en la espera pública también ha transformado en las últimas décadas esta fiesta popular de la Tacita de Plata, con la participación de la mujer, ya no solo como integrante de agrupaciones, sino también como autoras.
Aunque la mujer siempre ha estado presente en el Carnaval gaditano desde sus orígenes, su participación quedó relegada durante mucho tiempo a un segundo plano, limitándose en muchos casos a la interpretación de coros mixtos o a la presencia en agrupaciones infantiles.
O, como ha comentado acertadamente en redes Reyes Cabrales, "las mujeres eran las maquilladoras, las costureras, las vendedoras de libretos, pero ni siquiera en las agrupaciones callejeras teníamos un hueco".
Esta ciudadana ha comentado que hace 20 años se fue de la ciudad y entonces "el Carnaval era una cosa de hombre. Pocas referentes en mis años adolescentes, pero ahí estaban Adela del Moral y el coro de las niñas. En estos 20 años, que son nada, la mujer en el Carnaval ha construido (no encontrado, no ha sido fácil) su sitio. Oír hablar de tal romancera, de tal chirigota femenina, ver mujeres en una final del Falla ganando primeros premios...".
El aumento de comparsas, chirigotas y coros femeninos ha demostrado que el talento y el ingenio carnavalesco no entienden de género. El cambio no ha sido solo cuantitativo, sino también cualitativo: las mujeres han pasado de ser meras espectadoras o intérpretes a ocupar espacios de creación y liderazgo, con autoras que están marcando tendencias en las letras, que se están encontrando en las necesarias referentes para las jóvenes, y la música del Carnaval.
Este año, por primera vez en la historia, el primer premio de las tres modalidades diferentes ha recaído en agrupaciones que tenían en sus filas a mujeres.