La situación hidrológica en Córdoba se ha visto agravada por el paso de la borrasca Laurence. Más de diez familias han sido desalojadas de cinco parcelaciones ubicadas en zonas inundables como medida preventiva.
La combinación de las precipitaciones y el desembalse de varios pantanos, que superan el 100% de su capacidad, ha llevado al río Guadalquivir a una situación de aviso rojo. La ciudad ha activado el nivel 1 de emergencia para zonas inundables como las que se encuentran cerca del aeropuerto cordobés.
Desembalses en Córdoba
Según datos de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), consultados por Europa Press, el embalse del Guadalmellato se encuentra al 100,85% de su capacidad y está desembalsando cerca de 600 metros cúbicos de agua por segundo. Este flujo llega al embalse de San Rafael de Navallana, que ya está al 105,72% de su capacidad y libera casi 400 metros cúbicos por segundo. Ambos embalses están contribuyendo significativamente a la crecida del Guadalquivir.
🇪🇸 Así está el embalse de San Rafael de Navallana, en Córdoba y a escasos dos kilómetros del río Guadalquivir, está al 105% de su capacidad.
— Diosa Khali (@DiosaKhalinda) March 18, 2025
Todo este caudal será vertido al mar, porque la AGENDA 2030 es más partidaria de las restricciones al consumo de agua que de las reservas pic.twitter.com/AFDNBuFgIc
Además del Guadalmellato y San Rafael de Navallana, otros pantanos como Sierra Boyera (101,10%) y Bembezar (100,49%) también superan su capacidad máxima. Embalses como Guadanuño, Hornachuelos y Retortillo están cerca del 90% de su capacidad y también están desembalsando. Esta situación ha generado un efecto en cadena que mantiene al Guadalquivir en niveles críticos a su paso por Córdoba, con una lámina de agua que alcanza casi 3,6 metros.
El Ayuntamiento declara el nivel 1 de emergencia
Ante esta situación, el Ayuntamiento de Córdoba ha declarado el nivel 1 de Emergencia Local, focalizado en las áreas más propensas a inundaciones. La decisión fue tomada durante una reunión de urgencia del comité asesor del Plan de Emergencia Local, presidida por el alcalde José María Bellido. La CHG había emitido previamente el aviso rojo, indicando una "situación hidrológica muy peligrosa" que podría derivar en inundaciones de zonas habitadas y cortes en vías de comunicación.
Las medidas de emergencia se centran en las parcelaciones más vulnerables: Ribera Baja de Alcolea, Camino de la Barca, Guadalvalle, La Altea y el asentamiento Molino del Ciego en el Arroyo Pedroche. La Policía Local ha recibido la orden de evacuar a los residentes de estas zonas. Para quienes no cuenten con alternativas habitacionales, el Ayuntamiento ha dispuesto alojamientos en varios hoteles de la ciudad.
La vigilancia en estas áreas será constante, con agentes de Policía Local monitoreando la evolución del río y reportando al comité asesor. En caso de que la situación empeore, se podrían ampliar las órdenes de evacuación a otras zonas en riesgo. Mientras tanto, las autoridades mantienen un seguimiento exhaustivo de los niveles del Guadalquivir y las condiciones meteorológicas, con el objetivo de minimizar los impactos de esta crisis hidrológica.