La esposa del empresario agrícola de Villacarrillo, detenido el pasado lunes por su presunta implicación en la desaparición hace cuatro años de un temporero senegalés, ha sido puesta en libertad tras declarar ante la Guardia Civil. A pesar de quedar en libertad, se le imputa un delito de tenencia ilícita de armas.
La mujer fue arrestada en Villacarrillo por agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) y trasladada al cuartel de Baeza, donde fue interrogada tras el hallazgo de una pistola no declarada durante un registro domiciliario. La investigación continúa en curso, mientras las autoridades siguen recopilando pruebas.
Registros y avance de la investigación
Desde el lunes, la UCO ha llevado a cabo varios registros en propiedades y estancias del empresario Ginés V. L., de 53 años, así como en domicilios de familiares en Villacarrillo. Estas inspecciones forman parte de la investigación en torno a la desaparición del temporero.
El arrestado, principal sospechoso en el caso, deberá pasar a disposición judicial antes de mañana jueves, plazo máximo de 72 horas desde su detención. Se espera que el juez determine los próximos pasos del proceso y las posibles medidas cautelares.
La desaparición de Ibrahima Diouf
El detenido está acusado de la desaparición forzosa de Ibrahima Diouf, un jornalero senegalés de 31 años que trabajaba a su servicio y del que no se tienen noticias desde el 5 de enero de 2021.
Según las investigaciones, el temporero fue visto por última vez aquel día arrastrando una maleta roja camino de la casa de su empleador, Ginés V.L., un empresario local del sector del olivar. Diouf había acusado al detenido de abuso laboral y, según testimonios, se dirigía a reclamarle los salarios que le debía antes de marcharse definitivamente.
Antecedentes del empresario
El empresario Ginés V. L. ya estuvo implicado en otro caso similar. En 2013, fue acusado de la desaparición de otro temporero, Tidiany Coulibaly, un trabajador maliense de 22 años que estaba bajo su cargo.
En 2016, fue absuelto por falta de pruebas, aunque sí fue condenado por explotación laboral en relación con sus empleados. Este nuevo caso ha vuelto a poner en el punto de mira sus prácticas y la gestión de sus trabajadores temporeros.
Las autoridades siguen con la investigación para esclarecer los hechos y determinar la responsabilidad del detenido en la desaparición de Ibrahima Diouf, cuyo paradero sigue siendo un misterio cuatro años después.
