La junta de gobierno local ha aprobado el estudio de detalle del proyecto municipal de la calle Cristal, en pleno barrio de Santiago, en la primera corona del centro histórico. Dicho documento urbanístico, que estará en periodo de exposición durante un mes y posteriormente será llevado a pleno para su aprobación, ha sido presentado este martes por la alcaldesa Mamen Sánchez, junto al delegado de Urbanismo, José Antonio Díaz, y al director municipal de planeamiento, Benito García Morán.
El citado proyecto, que incluye las antiguas bodegas de Bobadilla (del siglo XVIII) y también incluye zonas del antiguo monasterio de los Padres Mercedarios, forma parte de "una de las prioridades de nuestro gobierno cuando llegamos, en el sentido de recuperación de espacios urbanos que estaban degradados abandonados durante muchos años en el casco urbano para su consolidación”, ha explicado la alcaldesa. Del mismo modo, ha subrayado que “este proyecto de calle Cristal supone una palanca de transformación del barrio de Santiago.
Un espacio de titularidad municipal que pasará a contar con usos residencial, equipamiento público y espacios libres. La bodega sería un espacio para viviendas —se estima entre 25 y 50 viviendas en dos alturas, con posibilidad de garaje individual y piscina comunitaria— y recuperamos todo el jardín para la ciudadanía”, recordando además que “es un jardín singular y protegido, que lleva 30 años abandonado, de manera que creamos un pulmón verde en el entorno de Santiago”.
En cuanto a los usos expuestos en el estudio de detalle del proyecto de calle Cristal, serán para uso residencial 2.542 metros cuadrados; 2.326 metros cuadrados para equipamiento público y 6.807 metros cuadrados para espacio libre público, según reza en el documento confeccionado por el Departamento de Planeamiento de la Delegación de Urbanismo.
Igualmente, la regidora socialista ha añadido que “vamos a recuperar dentro del proyecto de calle Cristal un molino del siglo XVIII y la fachada que da a la calle de la Merced". "Es un proyecto singular, con viviendas singulares, que además beneficiará a todo el barrio de San Mateo y Picadueñas, que es su área de influencia más próxima. Este es un ejemplo práctico de cómo se recupera un espacio abandonado que estaba en desuso”.
Generar actividad económica en la zona de Santiago
Por su parte, el teniente de alcaldesa José Antonio Díaz ha indicado que “como ha afirmado la alcaldesa, es un compromiso con los vecinos y vecinas de Santiago, un estudio de detalle que supone la transformación del entorno y que, por ‘efecto simpatía’, puede generar actividad económica en el barrio y en su entorno”.
De esta manera, “el proyecto posibilitará la licitación y que se pueda adquirir la bodega residencial. Hay reordenación de los usos y de los espacios en superficie, que hace más atractiva la bodega y un ajuste de la parcela del antiguo molino, marcando su interés patrimonial”, ha remarcado José Antonio Díaz.
Además, el teniente de alcaldesa ha enfatizado que “estamos creando equipamientos públicos, como el jardín, como espacio libre de uso ciudadano. Es una respuesta del gobierno de Mamen a las necesidades de lo vecinos y es la palanca que va a potenciar el barrio de Santiago, además vamos a proteger la fachada de La Merced. Es un estudio de detalle que va a suponer la transformación de Santiago y que va en consonancia con el modelo que está implantando el Gobierno de Mamen en otras zonas. Ahí está el plan de regeneración del centro histórico, actuación desde lo público para atraer la inversión privada, por ejemplo”.
La reordenación planteada en el estudio de detalle “libera al molino de las edificaciones que lo están enmascarando” y la fachada de la calle Merced “que es una construcción que nos parece muy interesante con dos remates”, ha afirmado Benito García Morán, director del Servicio de Gestión del Proceso Urbanístico del Ayuntamiento. En cuanto a la nave de bodega “está protegida y que ahora que los promotores se están animando, dentro de toda esta reordenación, damos más atractivo para las futuras viviendas. Con la bodega abandonada no tendría sentido recuperar el jardín, y viceversa”.
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