El Ayuntamiento de Jerez ha adjudicado por importe de 420.000 euros la venta forzosa de la finca de la calle Cazón, número11, a la empresa AYP Servicios Integrales de Formación SL.
Esta empresa presentó una propuesta a la licitación convocada para la sustitución de sus actuales propietarios por incumplimiento de sus deberes urbanísticos.
La propuesta incluye la construcción de 44 viviendas en una finca ubicada en el barrio de San Miguel, frente al Palacio de Villapanés.
Según explica el propio Ayuntamiento, se trata de una antigua bodega del siglo XVIII catalogada en el conjunto histórico-artístico como de interés genérico, por lo que tiene un gran valor patrimonial. Su superficie asciende a 1.980 metros cuadrados.
"Con esta venta forzosa no sólo se consigue ampliar el parque residencial en el centro histórico, sino que también se propicia la rehabilitación y puesta en uso de un edificio histórico de Jerez", señala el Consistorio. Igualmente, con esta actuación "se da respuesta a una de las demandas expuestas en la Mesa del Centro Histórico en materia de rehabilitación y recuperación del patrimonio arquitectónico de la ciudad", dice el gobierno local.
Tras esta nueva adjudicación, el gobierno Local "ha culminado los seis expedientes de venta forzosa que se iniciaron en la presente legislatura y que van a posibilitar la construcción de 86 nuevas viviendas en el centro histórico, sumando un importe de 1.004.275 euros".
Cabe recordar que el Ayuntamiento incluyó entre los criterios de valoración el destino residencial de las fincas que se licitan, cumpliendo así el objetivo de impulsar la construcción de vivienda en el centro para favorecer la llegada de nuevos residentes.
A&P Servicios Integrales de Formación S.L. ya ganó otra licitación
Las empresas privadas han puesto sus ojos en estos procedimientos de venta forzosa -similar a la pura expropiación- de inmuebles abandonados. Hay inversores que están adquiriendo estas casas para construir.
A&P Servicios Integrales de Formación S.L. ya ganó el concurso para un lote de dos inmuebles alrededor de la calle Carne, muy cerca de Porvera, en concreto en Cocheras y en Morla, entre Chancillería y plaza de Salvador Allende.

Aquel proyecto incluía la construcción de 18 viviendas, en sendas parcelas de 385 y 496 metros cuadrados. Fueron las dos primeras fincas en las que se aplicó el criterio de favorecimiento de llegada de nuevos residentes.
Este procedimiento implica que la mejor oferta económica obtiene 60 puntos, pero también se valoran otros 40 puntos en función de si es para un futuro uso residencial o que al menos tengan dos dormitorios.