El Ayuntamiento de Jerez ha otorgado la licencia de obras para la rehabilitación integral del antiguo Cine Jerezano, un edificio emblemático cerrado desde hace dos décadas que renacerá como un espacio escénico de primer nivel. El proyecto, impulsado por las empresas Gran Rialto SL y beon. Worldwide, convertirá este icónico local en un teatro moderno con capacidad para unas 1.000 butacas, posicionándose como un referente cultural no solo para la ciudad, sino para toda la provincia de Cádiz.
El teniente de alcaldesa, Agustín Muñoz, ha destacado que esta intervención supone "un importante impulso a la cultura como motor de desarrollo económico" y refuerza la candidatura de Jerez como "Ciudad Europea de la Cultura 2031". Además, ha subrayado el valor patrimonial del inmueble, diseñado en 1948 por el arquitecto madrileño José María Rodríguez Garrido, que recuperará su esplendor tras años de abandono.
El futuro teatro, que aspira a albergar grandes producciones nacionales e internacionales, contará con una infraestructura versátil y adaptada a la normativa actual para garantizar seguridad, accesibilidad y comodidad. Según ha avanzado Darío Regattieri, CEO de beon. Worldwide, el sueño es inaugurar el espacio con el musical "La historia interminable" y atraer espectáculos de Broadway, marcando un hito en la oferta cultural jerezana.

El proyecto, con un presupuesto estimado entre dos y tres millones de euros, prioriza conservar el mayor número posible de butacas originales, fusionando así la nostalgia histórica con las exigencias técnicas de un teatro moderno. Las obras incluirán la construcción de un sótano —clave para alojar los equipamientos de grandes producciones— y la adecuación de los accesos y fachadas, respetando siempre las directrices de protección patrimonial.
Previamente a esta fase definitiva, ya se ejecutaron trabajos preparatorios como la retirada de mobiliario, catas arqueológicas, limpieza y actualización de instalaciones. La intervención cuenta con el respaldo técnico de la Delegación de Urbanismo, dirigida por Belén de la Cuadra, cuyo equipo ha colaborado estrechamente con los promotores para agilizar los trámites.
La Junta de Gobierno Local aprobó el pasado verano la actualización de las prescripciones de protección del inmueble, avalada también por la Comisión Local de Patrimonio Histórico en julio. Estas modificaciones permiten, entre otros aspectos, adaptar los huecos de fachada a las calles Caracuel y Rosario, así como a la Plaza San Andrés, siempre preservando su esencia arquitectónica.
Una vuelta a la vida
El Cine Jerezano, que cerró sus puertas en 1999 tras medio siglo de actividad, vuelve así a la vida con una ambiciosa apuesta cultural. Su reapertura no solo reactivará un edificio clave del patrimonio local, sino que reforzará el tejido creativo y turístico de la ciudad, coincidiendo con su aspiración a ser Capital Europea de la Cultura.
Las autoridades confían en que este proyecto sirva de catalizador para otras iniciativas culturales en Jerez, consolidando su proyección como destino de referencia. Mientras avanzan las obras, la ciudad mira hacia 2024 —año en que se cumplen 25 años de su cierre— con la expectativa de ver renacer un símbolo de su memoria colectiva.