Cuando parecía que se había puesto punto y final a la historia del jardín vertical de la calle Juan Sánchez, la Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Jerez aprueba este martes la venta del solar donde se ubicaba este proyecto, inaugurado en 2015 junto al Centro de Negocios del Convento de San Agustín en la calle Puerto.
Así lo han confirmado fuentes municipales a lavozelsur.es tras la reunión de este martes, donde se ha aprobado la venta del solar de propiedad municipal de la calle Juan Sánchez, 1 por importe de 24.840,44 euros, IVA no incluido, así como el pliego de cláusulas administrativas particulares que regirá el citado procedimiento. El solar, que tiene una superficie de 48 metros cuadrados, está urbanizado al haber "tenido usos anteriores" según recoge el propio consistorio, ya que es una parcela edificable con una altura máxima de 2 plantas y una edificabilidad máxima permitida de 95,44 metros cuadrados.
El sueño de un jardín vertical, un concepto ideado por el botánico francés Patrick Blanc, con el que dar verde a los barrios y centros urbanos de las ciudades fue ante todo efímero. Apenas duró unos meses en buen estado de conservación, yendo a menos hasta estar totalmente seco y en estado ruinoso unos años más tarde de su inauguración, provocando alguna que otra polémica sobre la gestión de su uso y conservación.

El jardín vertical, proyectado como uno de los atractivos más interesantes tras la inauguración del Centro de Negocios del Convento de San Agustín en Zona Franca, se ha quedado abandonado durante años hasta que a finales de 2023, el actual gobierno local decidió retirar la estructura, oxidada y en un estado lamentable.
La estructura, que llegó a chorrear agua y ser un problema para los viandantes y vecinos de la zona, fue retirada y fuentes del ejecutivo municipal hablaban de un "mural de arte urbano" en su sustitución, a la par que otros proyectos artísticos diseñados en espacios de la ciudad recientemente por artistas como Pol Tattoo o Cosa.V. Sin embargo, los jaramagos y hojas secas, donde hasta la gente miccionaba y defecaba, han dado paso a un solar desangelado que ahora el Consistorio ha puesto en venta. Está por ver cuál será su próximo propietario y el uso que le dará a este pequeño espacio que la ciudad abandonó a su suerte hace años y del que ahora quiere desprenderse.