Que en cualquier ciudad siempre es mejorable el mantenimiento de sus calles y calzadas es tan obvio como que siempre hay puntos ciegos u olvidados, que por mucho tiempo que pase nunca dejan de gozar del sueño de los justos. Como es el caso de un badén invisible en la calle Estancia Barrera, que trae de cabeza a muchos conductores jerezanos.
"Cualquier día se dejan ahí los bajos del coche", manifiestan algunos vecinos que presencian como día tras día como la falta de señalización provoca frenazos o llantazos de cierta consideración — es el único que no está pintado de blanco—, a pesar de que "por aquí ya no se puede ir rápido, porque fíjate todos los badenes que hay en la calle". "Si de día se ve poco, de noche te lo encuentras cuando escuchas el golpe", señala otro vecino.
Así que si usted transita por la zona de la Estancia Barrera — calles Obispo Cirarda y Puertas del Sol—, tenga cuidado porque el badén invisible que trae loco a los conductores jerezanos se encuentra justo en la intersección de esta zona con las calles Vista Alegre y Méndez Núñez.

La normativa actual, según recoge el artículo 5 del R.D. 1428/2003 que recoge el Reglamento General de Circulación para la aplicación y desarrollo del texto articulado de la Ley sobre tráfico, circulación de vehículos a motor y seguridad vial, establece que "se considerarán obstáculos de la calzada todos aquellos resaltos que incumplan la regulación básica que, al respecto, establezca el Ministerio de Fomento" y esta norma, por tanto, obliga a todas las administraciones a lo que se estipula en la orden ministerial que lo regula.
Expertos legales en la materia consultados por lavozdelsur.es indican que la consideración de este badén invisible y sin señalizar como "obstáculo en la calzada", supone la posibilidad de que la administración competente de la vía — en este caso el Ayuntamiento de Jerez— esté incurriendo en "un supuesto de responsabilidad" que, en caso de accidente provocado por el mismo implique "el abono de los daños causados", a cuenta del erario público.