Antes de que la calle Larga se fuese despojando de algunas grandes firmas de moda para convertirse en una zona donde proliferan los bares y negocios relacionados con el sector de la belleza y la salud, esta popular artería de Jerez destacaba por el comercio tradicional y las llamadas tiendas de confección y ropa.
Enfrente del Gallo Azul, en lo que podría considerarse su espejo, estaba situada hace décadas una pastelería que elaboraba unos dulces que siguen haciendo la boca agua a aquellas personas que tuvieron la suerte de probar los productos que se elaboraban en aquella primitiva pastelería La Esperanza.
Ese mismo lugar, que contaba con un obrador de un gran prestigio en la ciudad, dio paso posteriormente a confecciones Pampa, una tienda donde muchos jerezanos acudían a comprarse ropa en ausencia de las grandes superficies que llegaron años después.
Como curiosidad, en la primera planta del edificio estaba el Banco Vitalicio de España, Compañía Anónima de Seguros y Reaseguros. ¿Una compañía anónima de seguros? Cosas de otros tiempos.
Dos establecimientos míticos que guardan muchos recuerdos de tiempos pasados. Una imagen del Jerez de antes que gracias a las redes vuelve para recordar aquellos tiempos que descansan sin olvidarse.