El Grupo Municipal Socialista de Jerez ha reprochado la falta de autocrítica por parte de la alcaldesa María José García-Pelayo, tras la petición de dimisión del delegado del Centro Histórico, Agustín Muñoz, a raíz del derrumbe de una finca en la calle Zarza. El PSOE sostiene que la responsabilidad del delegado es evidente, después de conocerse las reiteradas solicitudes de actuación por parte de la propiedad que no obtuvieron respuesta. La alcaldesa, un día antes, acusaron a los socialistas de buscar "dimisiones antes que soluciones".
El portavoz socialista, José Antonio Díaz, ha acusado a la alcaldesa de anteponer sus intereses personales a los de la ciudad. "La alcaldesa Pelayo no puede dar lecciones de nada, una alcaldesa que le preocupa poco o nada Jerez, su prioridad es seguir acumulando cargos como senadora y presidenta de la FEMP para seguir siendo aforada y cobrar dos sueldazos, 122.000 euros, la alcaldesa mejor pagada de España", afirmó.
Según Díaz, Pelayo se niega a cesar a su delegado porque, a su juicio, "es cómplice del desmantelamiento del área de Urbanismo, que ha provocado retrasos de hasta año y medio en la concesión de licencias". A esto añadió que la regidora "no debería atacar a la oposición porque el PSOE exija la lógica dimisión de su concejal" y que "debería preocuparse más, ya que podría haber ocurrido una tragedia con víctimas".
Duras críticas a la gestión municipal
El grupo socialista considera que la reacción de la alcaldesa responde a su forma habitual de actuar. "Cuando se le dicen las verdades, la alcaldesa Pelayo siempre reacciona de la misma manera: utiliza el insulto y las descalificaciones hacia el PSOE. Su actitud cortijera y dictatorial no nos va a intimidar", manifestó el portavoz.
Díaz también cuestionó la legitimidad de la mayoría absoluta obtenida por el Partido Popular en las pasadas elecciones municipales. "La alcaldesa alardea con soberbia de mayoría absoluta, pero hay que destapar la letra pequeña, las mentiras y promesas con las que ganó las elecciones", aseguró.
Entre las acusaciones, el PSOE se pregunta si durante la campaña se pidieron votos "a cambio de viviendas, puestos de trabajo, casetas de feria o cargos en el Ayuntamiento". En este sentido, denuncian que "todo el mundo sabe que la alcaldesa miente, engaña y manipula", y cita como ejemplo la subida de impuestos aprobada tras las elecciones, "a pesar de haber prometido lo contrario en campaña".
Críticas a la gestión económica y presupuestaria
Desde el Grupo Socialista también se ha denunciado que a día de hoy el gobierno local no ha sido capaz de aprobar un presupuesto municipal, lo que a su juicio agrava los problemas de gestión en la ciudad. Además, critican que se han incrementado en 20 millones de euros las gratificaciones a una “élite de la plantilla municipal”.
Asimismo, califican de “caótica” la gestión en las empresas municipales, y acusan a Pelayo de no dialogar con la oposición, a la que ni siquiera convoca para reuniones o consensos básicos.
