La asociación de familiares y amigos por la recuperación de la Memoria Histórica en Jerez y la comarca; el Grupo Memorialista de Jerez; y el Grupo por la Memoria Histórica y Democrática de Jerez registraron la pasada semana una petición dirigida a la alcaldesa Mamen Sánchez para que, en cumplimiento de la nueva Ley de Memoria Democrática, retire de un lugar público, como es el cementerio de Jerez, la lápida dedicada al coronel golpista Salvador de Arizón, responsable máximo de la represión en la zona tras el Golpe del 36.
Días después, el delegado de Cultura Francisco Camas ha respondido a la petición, asegurando que desde el gobierno local de Jerez están en contacto con la familia del responsable militar del golpe en Jerez para que, en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica, "retire o corrija" la lápida honorífica con que cuenta en el camposanto jerezano.
"En relación al cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica, tenemos que decir en primer lugar que este gobierno va a cumplir escrupulosamente con lo que indica esta ley, y en relación a la inscripción, que es improcedente, en la lápida del coronel Arizón, lo que procede en estos momentos, según recomendación jurídica, es hablar con la familia para que proceda a retirar la lápida o bien, a retirar la frase que no procede de acuerdo con la Ley", ha dicho Camas en declaraciones difundidas por el departamento de prensa del Ayuntamiento de Jerez.
El texto de la controvertida lápida dice: “El Excmo. Sr. D. Salvador de Arizón Mejía, Marqués de Casa Arizón, Coronel de Caballería, Comandante Militar de Jerez de la Frontera en el Alzamiento Nacional; Hijo Adoptivo y Predilecto de Jerez de la Frontera, Sanlúcar de Barrameda y Grazalema; Medalla Militar Individual y Medalla de Jerez. Falleció el 27 de marzo de 1963 a los 75 años…”.
La petición no es nueva, pues lleva años demandándose eliminar una lápida que exhibe los méritos de guerra del golpista, pero a raíz de la entrada en vigor de la nueva Ley, los grupos memorialistas del municipio han registrado este escrito advirtiendo al Ayuntamiento jerezano de que dicha lápida incumple la norma, ya que en ella "se ensalza la figura del responsable de la ejecución de cientos de jerezanos y jerezanas".
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