Conocida es la deuda que Lola Flores tuvo con Hacienda y que le llevó a pedir públicamente "una peseta" a todos los españoles.
En 1987 fue cuando la Agencia Tributaria investigó a la artista jerezana por no haber presentado su declaración de la Renta entre los años 1982 y 1985. Un total de 28 millones de pesetas debía y el fiscal solicitó dos años y un mes de prisión. Lola también se tuvo que enfrentar a la petición de una multa de 96 millones de pesetas y una indemnización de 50 millones.
Sus deudas y problemas con el fisco se hicieron públicas, pero no tanto se habló a nivel mediático de la generosidad de La Faraona. El programa Lazos de Sangre, dedicado a su figura, habló sobre la ayuda económica que prestó la irrepetible artista a mucha gente.
"Yo me he enterado con el tiempo de que mi madre ha ayudado a mucha gente, pero me he enterado cuando ella ha faltado. La gente me ha parado por la calle y me ha dicho: 'Yo tengo casa gracias a tu madre'", ha contado Lolita, la hija mayor de la jerezana.
"Tenía un agujero en la mano. Soltaba el dinero siempre. Veía a un dinero que tenía frío, se quitaba la chaqueta y se la daba", ha recordado su hermana Carmen Flores.
Lola Flores presumía de ello: "Como no voy a ser la más rica del cementerio, soy una mujer que goza teniendo la nevera llena. Y cuando llegue alguien a mi casa y le pregunte si ha comido y me diga que no, pues le digo que se quede a comer".
Su hija Rosario Flores también ha detallado: "Ayudaba a todo el mundo y la gente siempre venía a pedir ayuda a mamá".