Desde este jueves, El Puerto de Santa María ha tomado el testigo de Sevilla como sede del Puro Latino Fest, un evento por el que han pasado o pasarán artistas como Manuel Turizo, Maluma, María Becerra, Anuel, JC Reyes, Saiko, Morad, Gente de Zona o Juan Magán y en el que se suelen dar cita miles de jóvenes de toda la provincia de Cádiz.
Hace apenas un mes el festival se celebró en Sevilla y no estuvo exento de polémica. Una imagen curiosa fue la de uno de los artistas marchándose del escenario porque la mayoría de los asistentes estaba pendiente de un partido de la selección española en la Eurocopa. Pero también hubo críticas a la organización por la 'espantada' de JC Reyes uno de los días a los pocos minutos de subir al escenario. Al día siguiente los organizadores alegaron un problema técnico y JC Reyes repitió su actuación.
El evento de El Puerto también ha comenzado con revuelo. Bien adentrada la madrugada era el turno de Yandel. El artista duró sobre el escenario poco más de 15 minutos según han confirmado varios asistentes al concierto a lavozdelsur.es, que además aguran que no hubo "explicaciones" y que se pusieron canciones "de forma aleatoria". Sin embargo, lo que ha provocado las quejas ha sido lo sucedido minutos después.
Fueron muchos los asistentes que tras esta actuación decidió volver a sus respectivos municipios. El Puro Latino, para facilitar los desplazamientos, pone autobuses desde diferentes puntos de la provincia de Cádiz que actúan como lanzadera y que van saliendo según se van llenando, tanto para ir como para volver.
Las personas que abandonaron el recinto tras Yandel se encontraron con una fila de autobuses sin conductor. En la zona donde suele parar el que tiene como destino Jerez, ni siquiera había vehículo. Todo ello provocó el caos más absoluto entre aquellos que optaron por abandonar el festival antes de que acabara la jornada. "Entre que el de Yandel terminó forzosamente y no duró ni media hora y que el siguiente no tenía demasiado bombo, mucha gente decidió irse", cuenta uno de los asistentes a los conciertos.
Por lo que pudieron conocer en diferentes conversaciones, la organización envió un recordatorio el día anterior para señalar que la vuelta sería a las 4:15 de la madrugada, cuando finalizaran todas las actuaciones. "Tienes que ver el festival entero y luego irte. Los años anteriores si te has querido ir antes lo has podido hacer sin problemas", comenta este mismo asistente.
La llegada de algunos de los conductores hizo que se acelerara el proceso, pero la multitud que se concentraba en las explanadas era ya imposible controlar. "Daba miedo ver a la gente acumulándose, intentando colarse, gritos, empujones...", aseguran los presentes que estuvieron "dos horas esperando". "No es un trato lógico y justo para la gente. Lo normal es que ocurriera como en los años anteriores y las lanzaderas salgan de forma escalonada", denuncian asistentes.
Este medio se ha puesto en contacto con la organización del evento que ha confirmado los problemas ocurridos, aunque Puro Latino lo achaca a que el público llegó antes de la hora a la que estaban convocados. Pese a ello, aseguran que se adelantó la salida de los autobuses y se consiguió desalojar todo antes de las 5:30 de la mañana, "un tiempo récord".