Todavía sigue coleando la polémica vivida el Lunes Santo con la Hermandad de La Cena como protagonista. La corporación de San Marcos decidió regresar a su templo en plena calle Larga, entrando por la Alameda del Banco y recreándose en Tornería con la Paz de Fátima esperando detrás.
El obispado lo sabía
Un hecho que ha vuelto a colocar a Muñoz Natera, hermano mayor de La Cena, en el ojo del huracán. Una circunstancia sin precedentes en la Semana Santa actual. No por el hecho de regresar a su templo recortando camino, sino porque era algo que ya se sabía de antemano, antes de salir incluso de San Marcos, tal y como ha reconocido a los compañeros de Cofrademanía el presidente de la Unión de Hermandades, José Manuel García Cordero. "Desde la dirección de cofradías de San Marcos nos dijeron que tenían previsto salirse en Alameda del Banco".
Preguntado por Andrés Cañadas si eso es algo normal, Nene declaró: "No es normal. Consultamos y el obispado dijo que no lo veía. Se consultó. Sabíamos que iba a suceder. Hablamos con el Cecop y con el grupo nuestro. Cena nos había avisado eso".
La delegación diocesana permitió el incumplimiento
Y dos cuestiones en el aire. ¿Es de recibo que una hermandad decida recortar antes de salir a la calle? ¿Cómo es posible que la delegación diocesana permita el incumplimiento de unos estatutos que dejan bien claro que las hermandades tienen que salir a la calle para hacer estación de penitencia a la Catedral? "El obispado no dice ni que sí ni que no", ha comentado García Cordero.
Desde el obispado tenían conocimiento de que La Cena se iba a salir por Alameda del Banco. Y lo hizo antes de que empezara incluso a llover. En este sentido, Cañadas ha indicado: "Es muy grave lo que está ocurriendo. Con qué derechos se le dice al resto de hermandades que no lo hagan. No es un plan de agua, es una pirula en toda regla. Hay dos pasos chorreando por culpa de todo esto".
