Ocho días lleva en paradero desconocido José Dorrey González, el presunto maltratador de una menor de 17 años de Jerez. Ocho días sin descanso para la familia de la víctima. "No vamos a parar hasta encontrarlo y que se haga justicia. Ha estado a punto de matar a mi hija", confiesa Victoria, la madre de una joven que ha mejorado algo de las lesiones, pero que sigue sin descansar por el miedo tras todo lo sucedido.
Como acredita el parte médico presentado en la denuncia realizada en la Comisaría de Jerez, son múltiples las contusiones que sufre, con hematomas e importantes lesiones en la mama izquierda, el abdomen, la dorsal izquierda, la lumbar derecha, en los muslos y en la rodilla. Al desplazamiento de mandíbula que ha sufrido hay que sumar las numerosas mordeduras recibidas. "Mi hija tiene contados más de 50 bocados", confiesa su madre.
La menor logró escapar de las garras de su agresor, que la amenazó en varias ocasiones de muerte, tras comentarle que no le inculparía a él de la brutal paliza.
La Policía Nacional sigue peinando Jerez y diferentes puntos de la Sierra de Cádiz en busca de este individuo que, como adelantaba ayer este medio, no es la primera vez que ha sido denunciado por malos tratos. Siendo todavía menor cumplió un año en un centro de menores por las agresiones a Paula, su primera víctima, que ha decidido dar el paso de contar el infierno que vivió junto a él durante los tres años que fue su pareja. "Me decía que era una puta y una guarra porque iba enseñando el culo. La primera vez me pegó con un bote de desodorante y me ató a la pata de la cama con un cinturón. Fue cuando me rompió las costillas. Estuvo dos o tres horas pegándome", ha declarado a Informativos Telecinco.