Este pasado lunes, el cuerpo sin vida de Ignacio Cánovas fue encontrado a seis kilómetros del puente del río Genal, cerca de Ronda (Málaga), desde el que fue arrastrado por el agua. De 61 años, Ignacio pertenecía al Motoclub Jerezano y era muy conocido en la ciudad entre los amantes de las dos ruedas.
La ruta en la que perdió la vida la había realizado en numerosas ocasiones, pero el destino, tan caprichoso y fatídico en esta ocasión, quiso escribir un final trágico para este hombre al que sus compañeros y amigos definen como una “muy buen motero y mejor persona”.
Los moteros, de luto
Sus amistades han querido darle un último adiós compartiendo una imagen suya con un crespón negro, el deseo de que descanse en paz y un mensaje: "Ráfagas al cielo por nuestro amigo".
Algunos amigos también han salido al paso para defender la memoria de Ignacio de aquellas personas que, sin conocimiento de causa, se han atrevido a calificar de temeridad o imprudencia el intento de circulación de Ignacio por el puente. "De experiencia iba sobrado y si él pasó, yo hubiera pasado también", "como piloto era de los mejores" o "nunca vi una imprudencia por su parte", son algunos de los mensajes compartidos en redes, junto a la cantidad de condolencias y muestras de dolor tras este trágico suceso.
"Gran motero y gran piloto, pero, sobre todo, gran amigo", "de los mejores tipos que he visto encima de una moto", "echaremos mucho de menos los ratitos compartidos" o "siempre lo recordaremos con todo el cariño del mundo" han comentado las amistades de Ignacio Cánovas, al que se le perdió la pista el pasado 19 de marzo y que fue encontrado tras cinco días de intensa búsqueda en el río que le arrebató la vida. "El destino ha sido muy trágico con él. Ha tenido muy mala suerte", destacan sus amistades.
