La Guardia Civil ha recuperado en Jerez dos campanas de iglesia datadas en el siglo XVIII, sustraídas recientemente de la parroquia del Santísimo Cristo de la Sed, en la misma localidad. Las piezas, consideradas de valor incalculable al tratarse de patrimonio histórico y religioso, fueron localizadas en un Centro de Reciclaje de la provincia gaditana durante una inspección rutinaria del equipo ROCA.
Como resultado de la operación, se ha procedido a la detención de una persona por un delito de robo y a la investigación de otra por receptación. Ambas campanas, que superan los 100 kilos de peso, serán devueltas al templo del que fueron sustraídas.
Una inspección rutinaria destapó el robo
Los hechos se remontan al pasado 5 de abril, cuando los agentes del equipo ROCA realizaban inspecciones en distintos centros de gestión de residuos y reciclaje de la Comandancia de Cádiz. Estas actuaciones forman parte del protocolo de control y seguimiento de materiales que pudieran tener origen delictivo.
Durante una de estas inspecciones, los guardias civiles detectaron dos campanas cuya apariencia antigua les generó sospechas. Tras las primeras indagaciones, confirmaron que habían sido denunciadas como robadas y que pertenecían a la citada parroquia jerezana.
Las campanas fueron reconocidas sin género de dudas por el titular-párroco de la parroquia del Santísimo Cristo de la Sed, quien además aportó documentación que acreditaba su procedencia. Una de ellas pertenecía originalmente a la Capilla de San Juan de Letrán, y fue cedida por la Hermandad del Nazareno a la parroquia afectada.
La Guardia Civil ha subrayado la importancia del hallazgo, dado el carácter único de las piezas y su valor como patrimonio cultural. El caso sigue en manos de las autoridades judiciales, mientras las campanas aguardan su regreso al lugar que les corresponde.