El Ayuntamiento de Jerez ha dictado una orden de ejecución urgente dirigida a la propiedad de la finca ubicada en la calle Zarza número 1, que este domingo sufrió el derrumbe de parte de su fachada y de la primera crujía. Así lo ha anunciado el primer teniente de alcaldesa, Agustín Muñoz, quien ha explicado que el objetivo de la orden es garantizar la estabilidad del resto del inmueble, mediante el apuntalamiento y la retirada de elementos inestables, en caso de ser necesario.
Muñoz ha destacado en primer lugar "que no ha habido daños personales que lamentar, y ésta, para nosotros, es la principal noticia de este suceso. Personalmente me he puesto en contacto con las personas afectadas (una familia de cinco miembros), que nos comunican que pasaron un gran susto, pero por suerte, tras pasar por el Hospital, tuvieron un diagnóstico leve. A partir de aquí, desde el Ayuntamiento nos personamos inmediatamente allí para conocer el estado de las personas que pudieran estar afectadas y para mostrar la ayuda y apoyo del gobierno municipal".
"La empresa muestra una actitud colaboradora"
Este mismo lunes se ha celebrado una reunión técnica en Urbanismo con los propietarios de la finca, en la que se les ha informado sobre la orden de ejecución y se les han detallado los pasos a seguir. "Los propietarios solicitaron licencia en agosto, no pudiendo iniciarse el expediente administrativo hasta el 30 de septiembre, fecha en que aportaron los últimos documentos preceptivos para la licencia; una vez revisada, se detectan deficiencias y se les hizo un requerimiento de nueva documentación, tanto para la licencia como para la autorización patrimonial, habiendo presentado la última documentación complementaria el pasado viernes, 28 de marzo".
Sobre las causas del suceso, Muñoz ha explicado que "se presume que, las lluvias insistentes y abundantes que han caído en las últimas semanas, unido a la falta de estanqueidad del inmueble debido a la citada intervención, pueden haber provocado el colapso del mismo".
Una casa del siglo XVIII con evidentes problemas
El inmueble, de siglo XVIII, ya había sido objeto de intervención municipal en abril de 2024, cuando Urbanismo ordenó paralizar y precintar unas obras no autorizadas que consistían en el desmontaje de la cubierta. Según ha apuntado el delegado de Presidencia y Centro Histórico, esta intervención habría dejado el edificio expuesto a las intensas lluvias de marzo, lo que podría haber sido el detonante del colapso estructural registrado el domingo.
La empresa, dice el Ayuntamiento, "ha mostrado una actitud colaboradora y tiene previsto iniciar estos trabajos de forma inmediata”. La orden de ejecución dictada solicita además la retirada de todos los restos caídos a la vía pública, así como instalar medidas de carácter permanente de seguridad, como redes de protección y vallado de la zona, hasta que se puedan llevar a cabo las medidas definitivas correspondientes".

Muñoz ha recordado que el mismo domingo, tras ser avisados por el Cuerpo de Bomberos, los servicios municipales se personaron en el lugar para coordinar las actuaciones necesarias. “El edificio se encuentra en una situación de ruina física inminente, presentando grietas en la fachada que presumen nuevos derrumbes y evidenciando un peligro real para la seguridad pública, por lo que se deben llevar a cabo nuevas medidas excepcionales de protección por peligro de extrema y urgente necesidad".
Los técnicos desplazados evaluaron tanto el inmueble colapsado como los edificios colindantes, que han sido descartados como afectados. La zona permanece vallada y, según ha indicado el Ayuntamiento, la finca ya se encontraba acordonada desde hacía semanas por su deteriorado estado, del que Urbanismo tenía constancia.
En cuanto a la circulación, la calle Zarza permanece cortada a la altura de Molino de Viento, y se ha modificado el sentido del tráfico en calles como Galván y Cerrofuerte. También se han establecido desvíos desde Empedrada, Molineros y otras vías cercanas, con el fin de garantizar la seguridad mientras duren las actuaciones en la zona.