Un sótano con 649 plantas de marihuana y una guardería de tabaco de contrabando con más de 700.000 cigarrillos y 13 kilos de picadura de tabaco. Es lo que ha encontrado la Guardia Civil en una vivienda de Jerez.
En total se han intervenido, además del tabaco y las plantas de marihuana, una escopeta recortada del calibre 12 cargada, más de 241 cartuchos y una amplia infraestructura eléctrica necesaria para el crecimiento de las mismas compuesto por siete aparatos de aire acondicionado, 53 lámparas, 35 ventiladores, siete extractores y tres filtros de carbono.
El servicio se llevó a cabo el pasado mes de septiembre en Jerez, cuando los guardias civiles, fruto de la estrecha colaboración que mantienen con la Policía Local y las investigaciones realizadas en prevención del tráfico de drogas, ubicaron un posible domicilio en el que se sospechaba se pudiera estar cometiendo varios hechos delictivos como cultivo de marihuana y almacenamiento de tabaco ilegal para su contrabando, teniendo en cuenta que, su morador poseía numerosos antecedentes por este tipo de delitos.
Las actividades investigadoras, numerosas indagaciones y vigilancias discretas, realizadas previamente por parte de Guardia Civil y Policía Local, se vieron dificultadas debido a que los responsables habían tomado numerosas medidas de seguridad para no ser descubiertos mediante la instalación de focos de gran alcance que se activaban con la aproximación a las inmediaciones del domicilio, así como, con cámaras de vigilancia que estaban activas las 24 horas del día, lo que impedía a simple vista percibir el olor o el enganche ilegal al alumbrado público desde el exterior.
De este modo, para poder recabar las pruebas necesarias tuvieron que emplear los drones del equipo Pegaso de la comandancia, donde se detectaron numerosos elementos que confirmaban las sospechas de los agentes.
En la entrada y registro del domicilio, previa autorización judicial, los guardias civiles, localizaron a los dos sospechosos, uno de ellos, que resultó ser el morador de la vivienda, que dormía con una escopeta recortada del calibre 12 municionada junto a su cama y 241 cartuchos compatibles con el arma.
Durante la actuación, los agentes procedieron a la detención del segundo sospechoso y al hallazgo de un sótano, que había sido fabricado exclusivamente para albergar, en varios habitáculos, las 649 plantas de marihuana conservadas con una amplia infraestructura eléctrica y un almacén destinado a almacenar abundante cantidad de tabaco de contrabando donde se localizaron más de 700.000 cigarrillos y 13 kilos de picadura de tabaco, valorado en más de 192.000 euros.
Por estos hechos se procedió a la detención y puesta a disposición judicial de dos personas de 37 y 24 años de edad, como presuntos autores de los delitos de tráfico de drogas, tenencia ilícita de armas, contrabando y defraudación de fluido eléctrico, así como, a la intervención de una escopeta recortada del calibre 12 cargada, más de 241 cartuchos compatibles y 7 aparatos de aire acondicionado, 53 lámparas, 35 ventiladores, 7 extractores y 3 filtros de carbono.
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