El centro de Jerez no gana para sustos últimamente y más después del derrumbe este pasado domingo de una casa en el barrio de San Miguel. Un inmueble del siglo XVIII que estuvo precintado meses atrás por unas obras ilegales y que había quedado con el techo al aire. Las intensas precipitaciones de hace unas semanas llevaron al empeoramiento, con desmoronamiento total de la edificación.
No pasaba nadie a esa hora
A este derrumbe que alertaba a vecinos de la zona en la jornada de ayer hay que sumar otro susto, aunque este de menor consideración, tras la caída de parte de la cornisa de un balcón de la calle Doña Blanca. Concretamente, en el edificio situado en el número 19 de dicha arteria jerezana.
Los hechos ocurrieron la madrugada del viernes. Afortunadamente, a esa hora no pasaba nadie por la zona y no hubo que lamentar ningún herido. Tal vez no hubiera sido lo mismo de haberse producido la caída durante el día, al ser una calle bastante transitada por los comercios que hay en la misma y por ser un punto de acceso al centro de la ciudad.
Delante de la fachada de Don Regalón
Los vecinos, al escuchar el estruendo de la caída del cascote, fueron los que dieron la voz de aviso tras lo ocurrido. Parte de la cornisa cayó justo delante de la fachada de Don Regalón, una tienda de regalos, cocina, baño y textil de hogar, entre otros productos.
"Nosotros nos encontramos con lo que había pasado al entrar al día siguiente. Los vecinos fueron los que llamaron", comenta a lavozdelur.es una de las empleadas de dicho establecimiento.
Tras la caída, como medida de prevención, se han colocado unas vallas en la fachada de la tienda para que los ciudadanos que pasen por esa calle no caminen por debajo del balcón por si hubiera algún desprendimiento más.
