Es un espacio relativamente pequeño —poco más de 200 metros de solar—, pero con una fuerte carga simbólica e histórica para la ciudad. El renacido Tabanco del Duque, en la calle Juana de Dios Lacoste, lindando con el Cine Astoria, abrió por fin sus puertas en abril de 2022 para exhibir la culminación de unos trabajos de rehabilitación que han recuperado este inmueble tan singular como señero.
Sin embargo, casi dos años después de la inauguración, el inmueble está vacío de contenido. A su vera, el antiguo Cine Astoria, un equipamiento muy especial en pleno centro de Jerez, también permanece clausurado.
En este caso, el triste fallecimiento en junio del pasado año de Antonio Segura, el hostelero que regentaba La Taberna del Segura, provocó que este espacio libre entre Juana de Dios Lacoste y Francos se quedara sin su guardián y amo de llaves, ya que Segura se encargaba no solo de abrir y cerrar sus verjas, sino que incluso mantenía los parterres con la vegetación que decora el Astoria.
Conocedor de estas circunstancias, el gobierno municipal ya trabaja en dotar de contenidos a estos dos equipamientos del intramuros jerezano, como así lo confirmó la pasada semana el primer teniente de alcaldesa y responsable de la delegación de Centro Histórico, Agustín Muñoz, que aseguró que se trabaja para que vuelva la vida a estos espacios sociales y culturales del casco viejo de Jerez.
En lo que respecta al Tabanco del Duque, la idea que se planteó para el espacio era polifuncional, con especial protagonismo para que sirviera de punto de encuentro vecinal, mientras que el Astoria, aparte de zona de esparcimiento al aire libre, ha sido tradicionalmente espacio para proyecciones cinematográficas de verano o incluso para celebrar espectáculos flamencos en aquellos Viernes Flamencos del Astoria. Veremos ahora qué les depara el futuro a ambas infraestructuras tan queridas del corazón de la ciudad.