El segundo espacio que integrará el Centro Cultural Lola Flores en Jerez, que desde el pasado año tiene abierto al público el museo instalado en la Nave del Aceite dedicado a la vida y obra de la artista universal, no será inaugurado finalmente hasta el próximo otoño, según las previsiones de la familia de La Faraona de acuerdo con el Ayuntamiento, que es quien corre con los gastos de las rehabilitaciones, adaptaciones y proyectos museísticos de estos espacios públicos.
Según ha podido saber lavozdelsur.es, pese a que en un principio se previó que el llamado tablao (también conocido en los medios como tabanco) de Lola Flores se inaugurase en otoño pasado, y a que posteriormente se ofreció una nueva fecha de estreno con vistas a esta primavera, el proyecto ha ido sumando retrasos y ahora el objetivo es que se haga realidad después del próximo verano, "coincidiendo además con un rodaje importante que hay previsto", señalan fuentes municipales.
Para seguir quemando etapas en esta actuación, precisamente este pasado lunes la junta de gobierno local aprobó la continuidad de los trabajos de musealización de la planta alta del segundo inmueble que integra este complejo dedicado a Lola en la plaza Belén del centro histórico de la ciudad.
La redacción del proyecto museográfico del conocido como futuro tablao de Lola Flores, adjudicada a la empresa Frade Arquitectos SL, por valor de 18.145,16 euros, contempla enriquecer la exposición con la presencia de ‘El Pescaílla’, Carmen Flores, Lolita, Rosario y Antonio. Es decir, con el resto de los integrantes de la familia de La Faraona.
Rosario Flores ya estuvo visitando el edificio, concluido desde hace meses, a principios del pasado mes de diciembre, comprobando personalmente el resultado final de las obras de un inmueble que el delegado municipal de Cultura, Francisco Zurita, califica de "bomboncito".
La finca de titularidad municipal, ubicada en la plaza Belén, tiene dos plantas de altura y un patio al fondo al que también se le dotará de actividad. En su planta baja dispone de vestíbulo de acceso dotado de aseos, sala multiusos, office con mostrador y almacén. En la planta alta habrá una colección permanente que profundizará en el legado de Lola y en el de su familia. La superficie construida total del edificio asciende a 202,84 metros cuadrados, siendo la útil de 166,07 metros.