El instituto Padre Luis Coloma de Jerez es una auténtica institución, no solo por su impecable labor educativa, sino también por el legado histórico que ha dejado a lo largo de sus 184 años de vida. No en vano, es uno de los centros educativos más antiguos del país.
La Ministra de Educación, Pilar Alegría, visitó el centro hace unos días por la reciente condecoración que recibió el instituto público: la Placa de Honor de la Orden Civil de Alfonso X el Sabio, el mayor galardón que se puede otorgar a una entidad educativa en España.
Esta institución cuenta con un sinfín de archivos, elementos y tesoros históricos de todo tipo datados de hace muchísimos años, pero desde hace varios, un grupo de profesores ya jubilados se dedican a catalogarlos para su exposición en un museo que es todo un orgullo para el centro, para la ciudad y para Andalucía.
Concretamente en 2006, María Dolores Rodríguez se jubiló y decidió volcarse en esta tarea. Esta antigua profesora de Historia procedente de Badajoz ya había iniciado anteriormente las labores de búsqueda y catalogación, pero como explica, "mientras estaba dando clase no podía centrarme en esto y había muchísimas cosas por catalogar".
El Museo data de los años 80, cuando ella y otros profesores ya ejercían en el instituto y la Junta de Andalucía aprobó la ampliación del centro para crear un espacio en el que guardar lo que iban encontrando. Sin embargo, no fue hasta la época de los 2000 cuando empezaron a trabajar a conciencia en él.
En su interior se conservan todo tipo de libros y herramientas que los docentes de épocas pretéritas utilizaron par impartir sus clases. "Nosotros no éramos conscientes de la relevancia histórica de lo que íbamos encontrando", asegura María Dolores en conversación con lavozdelsur.es.
Además de ella, Justo Cuenda, Francisco Herrera, Montse Zoido y Manuel Molina son los exprofesores que se reúnen todos los lunes y viernes para realizar las tareas de análisis y catalogación, cada uno, dentro de su área de conocimiento.
Molina, por ejemplo, dio clases de Biología y se ha dedicado a analizar y organizar las piezas de zoología y geología. Aquí se encuentran una gran cantidad de animales disecados de todos los continentes. "Casi todos datan de los años 80 del siglo pasado, cuando era legal cazar estas especies que hoy en día están protegidas", señala.
En esta parte del Museo del IES Padre Luis Coloma se pueden observar multitud de animales, tanto terrestres como marinos, y un sinfín de aves de todas las especies. Además, cuentan con una colección abundante de fósiles y rocas que este cordobés de 62 años ha ordenado según su era. "Algunas de ellas las he traído yo, pero gran parte son regalo del Museo de Historia Natural de Madrid", señala.
Varias de las vitrinas de esta colección guardan artilugios usados en asignaturas de ciencias. Algunos de ellos son tan antiguos que, como dice María Dolores, "ni un profesor experto en la materia sabe para qué sirven". Así, añade que "quedaban muy bonitos expuestos en las clases, pero realmente no servían para nada porque no se sabía ni qué eran".
En este apartado, quiere hacer mención especial a Miguel Hernández, antiguo profesor de física que falleció recientemente. "A él le gustaba mucho todo lo que había en los departamentos de física y ayudó a catalogar muchos aparatos que estaban deshechos en trozos", recuerda.
Justo a la entrada tienen guardado en perfectas condiciones el que es el mayor herbario de la provincia de Cádiz. Fue elaborado por el farmacéutico aragonés Vicente Latorre, quien se lo regaló a su hermano Nicolás, que fue director del Coloma. "El Consejo de Investigaciones Superiores de Huesca vino a Jerez siguiendo la pista de este herbario para estudiarlo", comenta Manuel Molina.
"No se esperaban encontrar el herbario intacto, sino sus restos. Lo fotocopiaron y lo digitalizaron y nos dejaron conservar el original", apunta María Dolores. Las muestras están recogidas en cajas y cada una contiene hojas de periódico de diferentes medios escritos de la época que se utilizan para aislar la humedad a la vez que acreditan su fecha de creación.
También se encuentran expuestos diferentes aparatos audiovisuales como un televisor, varios reproductores de vídeo, un tocadiscos e incluso un proyector cinematográfico, todos en perfecto estado y capaces de funcionar gracias al ex profesor de filosofía Francisco Herrera.
De igual manera, se pueden encontrar otros artículos como una bandera oficial del instituto de 1950 y una colección de medallas que se otorgaban como premio al buen comportamiento a los alumnos en el siglo XIX.
Evidentemente, el Museo también guarda una gran cantidad de documentos escritos de todos los alumnos y profesionales que han pasado por sus aulas. Por ejemplo, uno de los más importantes es el expediente de Gertrudis Martínez Otero, la primera mujer que acabó el bachillerato en la provincia de Cádiz y la primera que terminó la carrera de Farmacia. A ella, por cierto, le han dedicado uno de los patios del centro.
Otros documentos que pueden suscitar gran interés son las solicitudes de admisión y las calificaciones de importantes personajes históricos de Jerez como Pedro Domecq o de figuras de la literatura andaluza como Rafael Alberti, Juan Ramón Jiménez o Pedro Muñoz Seca. También conservan un amplio número de libros que fueron manuscritos por los propios profesores para dar clase a sus alumnos y que mantienen en perfectas condiciones
El instituto ha expuesto fotocopias de todos ellos en unas mesas situadas junto al despacho del director, en el que, por cierto, también se exhiben varios cuadros donados por el Museo del Prado —años atrás donaba obras a los centros para elevar su prestigio—, así como elementos religiosos de la antigua capilla del instituto.
María Dolores y sus compañeros apenas han recibido subvenciones para trabajar en el museo, pese a su relevancia e importancia histórica, y todos los materiales que utilizan para mantenerlo son donados o reciclados. "Cuando las personalidades visitan la colección quedan muy impresionadas y nos dicen que van a ayudarnos a mantenerlo, pero con el tiempo se olvidan de nosotros", lamenta. Lo importante, pese a todo, es que la historia de una institución tan deslumbrante como el IES Padre Luis Coloma, en Jerez, sigue más viva que nunca.