Según el colectivo Jerez por la vivienda, más de 1.300 familias han perdido en Jerez su hogar por culpa de la turistificación. En los últimos tiempos, en la ciudad ha crecido de manera preocupante el número de viviendas que son destinadas a uso vacacional.
La alcaldesa de la ciudad, María José García-Pelayo, ha insistido en que Jerez no sufre una crisis habitacional, pero desde diferentes asociaciones y colectivos se están moviendo contra los alquileres turísticos.
Aunque el problema todavía no es extremo, ya hay propietarios de edificios con apartamentos que están destinados única y exclusivamente al uso turístico.
El mercado inmobiliario de la ciudad cada vez recoge más ofertas dirigidas a ciudadanos que están de paso por la ciudad. Y lo que empezó siendo algo propio casi de la zona céntrica, se ha expandido a otros barrios de la ciudad.
Esta llegada de las viviendas destinadas a alquileres turísticos es lo que ha llevado a los vecinos de una barriada de Jerez a plantarse ante este boom. La barriada de Torresblancas es una de las que han dado el primer paso contra la turistificación. Paseando por el referido barrio se pueden observar unos llamativos carteles colocados en las pistas polideportivas del barrio.
“La asociación de vecinos Tharsis declara Torresblancas zona libre de alquileres vacacionales”, se puede ver en uno de los referidos carteles. En otro de ellos, dicha asociación de vecinos también declara a este barrio jerezano como “zona libre de antenas de telefonía móvil”.
Hay que recordar que la proliferación de antenas de telefonía está generando grandes preocupaciones en la población sobre los efectos negativos sobre la salud de las personas que viven cerca de las mismas. Desde la AA.VV Tharsis han mostrado con estas pancartas su rechazo al impacto de la radiación en la salud de las referidas antenas.