Vecinos y vecinas de la jerezana barriada San Enrique, situada al lado de La Granja, han dicho basta al avanzado estado de abandono del colindante parque urbano, situado entre las calles El Españoleto y Abiertas de Caulina. A pesar del aparente buen estado del mismo, los ciudadanos denuncian que la degradación del mismo es absoluta: se ha perdido gran parte de las zonas de tierra, dejando al descubierto aristas metálicas cortantes y un suelo en el que es imposible que los niños jueguen. La sombra brilla por su ausencia, faltan papeleras y los excrementos de perro no se recogen por los servicios municipales. Las latas de bebidas energéticas y las botellas se acumulan en una antigua acequia que circunda el parque y que parece un vertedero.
"El parque está en un limbo, ni la empresa responsable del mantenimiento de zonas verdes ni la de recogida de residuos se hacen cargo de recoger todos los restos de botellones", aclara Mar Cordón, una de las vecinas afectadas. Y con la llegada del verano comienzan a sucederse botellones e incluso una rocambolesca pelea de boxeo juvenil que fue abortada la semana pasada por otro de los vecinos.
Frente a esta situación, los vecinos y vecinas de las calles cercanas han decidido pasar a la acción, y el pasado viernes comenzaron a adecentar el parque para sacarlo del olvido institucional. Brocha en mano y acompañados de sus propios hijos, repintaron los bancos de hormigón del parque, que han pasado del gris verdoso del hormigón repleto de verdín a cubrirse de tonos violetas, blanco e incluso de lunares.
"Tenemos previstas más acciones, y hemos comenzado a constituirnos como colectivo vecinal para reivindicar que somos tan ciudadanos de Jerez como cualquier otro. Existe una evidente desigualdad de trato con estos barrios de extrarradio respecto a las zonas residenciales con mayor poder socioeconómico. El barrendero pasa con menos frecuencia, lo mismo que al jardinero y al policía local ni se le espera", comenta Juan Antonio Contreras, otro de los vecinos que, brocha en mano, ha dicho basta a tantos años de abandono.
Los vecinos de la referida barriada han reivindicado e instado al Ayuntamiento de Jerez "a dar cumplimiento de la Ordenanza Municipal de Zonas Verdes y ajardinadas, que en su artículo 1º declara como finalidad de la misma la creación y reforma de zonas verdes y sus condiciones de uso, en la ciudad de Jerez de la Frontera, con el objetivo de desarrollar y mejorar el derecho de los ciudadanos al uso y disfrute de los espacios libres y zonas arboladas de la ciudad".
Entre las peticiones de estos ciudadanos se encuentran:
- Regeneración del firme - sustitución en la zona de tierra del parque. Eliminación de elementos peligrosos: salientes metálicos, aristas cortantes de antigua valla perimetral.
- Eliminación de alcorque de morera derribada por temporal-sustitución por nuevo ejemplar de árbol
- Medidas disuasorias para el tránsito de patinetes eléctricos y ciclomotores.
- Adecentamiento de monolito de sistema eléctrico para riego del parque
- Limpieza efectiva del sector del parque donde se sitúan adelfas.
- Embellecimiento de pivotes de travesía Goya
- Entrada en funcionamiento de fuente de agua potable.
- Recuperación del arbolado del parque, con replantación de ejemplares de gran porte.
- Medidas de seguridad ante el tránsito por la vía Abiertas de Caulina: vallado de seguridad, medidas disuasorias de velocidad.
- Adecuación de zona de juego-parque infantil.