El presidente del Consejo Regulador de los Vinos y Brandies de Jerez, César Saldaña, ha expresado su rechazo a los aranceles que pone en marcha Donald Trump, y que gravarán todo producto europeo con un 20% más. "Son malas noticias", resume.
Si bien "no son tan malas como las que en su momento recibimos con la amenaza del presidente Trump de un arancel de hasta el 200%". Porque "ese nivel de aranceles evidentemente te expulsa del mercado y, bueno, un arancel del 20% es un problema, es un problema importante, pero es un problema con el que se puede vivir".
Durante estas horas, el sector, bodega a bodega y organismos como el Consejo, están estudiando la situación. "Estados Unidos es un mercado complejo desde el punto de vista de la distribución y también desde el punto de vista de los consumidores. Son consumidores acostumbrados a pagar precios altos. Los precios con los que exportamos a Estados Unidos son significativamente superiores de media a aquellos con los que exportamos a otros mercados", reflexiona Saldaña.
Para que una botella de vino llegue a la mesa, actualmente hay un "sistema en tres niveles", que implica pasar necesariamente desde la importación hasta la distribución, "y habrá que ver en qué medida cada uno de esos escalones absorbe o no el incremento de costes que suponen estos aranceles".
Un mercado de entre 12 y 15 millones
Las ilusiones llevan años en una expansión en Estados Unidos, con bodegas que han articulado auténticas misiones comerciales para dar a conocer la marca. En Jerez, tanto vino como brandy, pero también vinos tranquilos, licores, "todo un conjunto de productos que elaboramos en el marco de Jerez". El negocio es de entre 12 y 15 millones de euros.
Las miras, ahora, van a estar en otros mercados si esta situación persiste, "un mayor esfuerzo de diversificación en otros mercados que pudieran absorber la caída que experimente el mercado norteamericano, mercados como el asiático, Japón, Corea, Vietnam, mercados también en Latinoamérica, como pudiera ser el caso de México, y desde luego mercados europeos y el propio mercado nacional, que todavía tiene capacidad de crecimiento para productos con alto valor añadido".
Una esperanza son las ayudas directas por parte de las administraciones, desde la Junta hasta Europa aunque especialmente del Gobierno central. Pide a los dirigentes políticos, eso sí, que la situación no escale, "no responder con aranceles agresivos, sino más bien negociar, tratar de reducir estos aranceles con los que se nos ha castigado. Es el momento de la negociación, no es el momento de escalar, por tanto hay que mantener la cabeza fría y tratar de minimizar este problema".
Pelayo: "Trump ya no sorprende a nadie"
La alcaldesa de Jerez, María José García-Pelayo, ha rechazado también la medida de Trump, que "ya no sorprende a nadie". La presidenta de la Federación Española de Municipios y senadora habla de "un frente común", porque esto "no va de partidos, es una cuestión de España".
Pelayo, en esa calidad de presidenta de la FEMP, se ha ofrecido a liderar "esa unidad frente a los aranceles" de todos los ayuntamientos. "No vamos a quedarnos quietos, vamos a activarnos".
Durante la mañana, ha explicado, ha conversado con Saldaña para ver las consecuencias en el sector y en los próximos días habrá un encuentro sobre todo lo que implica para el sector agroindustrial, que "no es solo el campo", sino también la industria de transformación.
"Hay que escuchar también al resto de partidos políticos y por supuesto a las administraciones para darnos todos la mano e intentar ser fuertes en Europa".