Poco más de dos meses ha durado la historia del jugador canario Joel Domínguez en el Xerez CD. Tras llegar a mediados de febrero rodeado de polémica por su pasado –fue condenado por violencia de género a los 17 años y por quebrantar, posteriormente, una orden de alejamiento–, la entidad azulina ha rescindido ya su contrato.
Después de ser suspendido de empleo y suelo por saltarse el régimen interno del club y por bajo rendimiento, el Xerez CD ha llegado a un acuerdo con su representante para acabar la relación laboral con el canario, que no levanta cabeza en lo futbolístico.
No se presentó el domingo
La gota que colmó el vaso llegó el pasado fin de semana, cuando Joel no se presentó con su equipo para viajar a Villanueva. Su breve paso por el Xerez queda reducido a cinco partidos, sin ninguna titularidad, y apenas cien minutos con la elástica xerecista.
"Nosotros no somos jueces para juzgar lo que haya hecho, lo que haya dejado de hacer o lo que no haya hecho. Quiero recordar a todo el mundo que viene a jugar al fútbol, es jugador nuestro y le pido a los xerecistas que estemos a muerte con él porque él va a estar a muerte con nosotros", llegó a decir Juan Luis Gil, presidente del Xerez CD, en la presentación del jugador azulino.
Tristemente, la carrera deportiva de Joel está más vinculada a su comportamiento fuera de los terrenos de juego que a su rendimiento en el césped. Tras salir de Las Palmas por no presentarse a entrenar con el filial, llegó también con polémica al CD Lucena, donde solo estuvo medio año, regresando a Canarias para recalar en el Unión Sur Yaiza, de la Segunda RFEF, donde también se marchó sin aportar nada en lo futbolístico.