Un okupa y su hija, de once años de edad, han hallado al entrar en una vivienda situada enMálagael cadáver momificado de una mujer que llevaba unos catorce años muerta.
La Policía Nacional ya ha abierto una investigación para aclarar las circunstancias de este hecho y saber cómo murió la mujer. El okupa, tras forzar la puerta de la entrada, tenía la intención de instalarse en el inmueble, pero la sorpresa que se llevó junto a su hija fue mayúscula.
Fue el propio okupa el que avisó a la Policía del descubrimiento, tal y como ha adelantado el diario Sur. Agentes de la Científica se desplazaron rápidamente hasta la vivienda para proceder al levantamiento de una mujer que tendría en el momento de su muerte sobre ochenta y tantos años.
Sorprende llamativamente que nadie se diese cuenta en su día del fallecimiento de la mujer. La casa se encontraba con todo intacto, como si no hubiera pasado el tiempo y con las ventanas abiertas.
La rotación de inquilinos en el edificio también pudo ayudar a que nadie se diese cuenta de la ausencia de esta vecina, que pudo ser una víctima más de la soledad a la que se enfrentan las personas mayores.