El Servicio de Memoria Histórica y Democrática de la Diputación de Cádiz ya ha contratado las tareas de exhumación de personas represaliadas en el cementerio de Villamartín. La intervención, en la que participa el Ayuntamiento de la localidad, comenzará en los próximos días —en cuanto lo permitan las circunstancias meteorológicas— por parte del equipo científico que coordina el historiador y arqueólogo Jesús Román.
Con esta iniciativa se cumple de manera efectiva el compromiso alcanzado por Diputación y expresado por su responsable de Desarrollo Democrático, Lucía Trujillo, ante los colectivos memorialistas de la comarca y familiares de víctimas.
Antes de llegar a este paso se resolvieron, en febrero de este año, los sondeos para verificar la existencia de restos de personas represaliadas. Las catas, financiadas mediante una subvención de la Federación Española de Municipios y Provincias, fueron positivas y confirmaron la existencia de fosas, en concordancia con los testimonios y los estudios históricos realizados sobre la represión ejercida en Villamartín, como es el caso de la investigación publicada por Fernando Romero.
La intervención pretende recuperar los restos de, al menos, 15 personas distribuidas en dos enterramientos colectivos. Las osamentas exhumadas también serán objeto de un estudio antropológico para determinar sexo, edad y características anatómicas de las víctimas.
Esta intervención no sólo suscita el interés de los vecinos de Villamartín, sino también de poblaciones limítrofes como Bornos, Espera, Prado del Rey o Puerto Serrano. Tras la sublevación de julio de 1936, y al amparo del bando de guerra, los represores solían ejecutar a las personas detenidas en otros términos municipales de manera que su localización fuera infructuosa. En consecuencia, los restos que se exhumen del cementerio de Villamartín pueden ser de personas de diferentes procedencias.
Diputación, además de financiar estas intervenciones sobre el terreno, emprende desde abril de 2022 el proyecto ADN. Consiste en la toma de muestras de saliva de descendientes de represaliados, al objeto de acelerar la creación de un banco genético. Estas referencias pueden compararse con el ADN extraído de los restos óseos procedentes de las fosas que se van recuperando. El proyecto ADN comenzó precisamente en Villamartín y también ha transitado por Espera y Arcos. Esta iniciativa de Diputación, contratada con la Sociedad de Ciencias Aranzadi, ya ha permitido el traslado de 100 muestras al Laboratorio de Identificación Genética de la Universidad de Granada.
Comentarios