El sector de Empresa Privada de CSIF Cádiz ha denunciado el agravio que sufren los vigilantes de seguridad del Centro de Menores La Marchenilla, en Algeciras, ante los constantes retrasos en el pago de sus nóminas de los últimos meses.
Esta situación, denunciada ante la Inspección de Trabajo, provoca perjuicios a estos trabajadores debido a los recargos y comisiones por demora que, por ejemplo, se les cobra en recibos domiciliados. Además, existen agravios comparativos entre el personal de la empresa Norvik Security Services (concesionaria del servicio de este centro de gestión pública), ya algunos cobran con hasta cuatro días de diferencia respecto de otros compañeros.
La situación viene a empeorar las condiciones de trabajo que sufren estos vigilantes de seguridad, dado el exceso de horas extra que han de realizar por la falta de personal suficiente para cubrir todos los turnos. Y es que, tal y como denuncia CSIF, la elevada carga de trabajo y la peligrosidad que supone trabajar en un centro de menores con dificultades sociales no repercuten en sus nóminas.
De hecho, este colectivo lamenta que el plus de peligrosidad que cobran es el genérico que aparece en el convenio colectivo en vigor, sin tener en cuenta las características de un centro de este tipo, en el que han de convivir con "constantes amenazas, insultos y agresiones". Por ello, piden un complemento de peligrosidad adecuada a sus circunstancias.
Ante todo esto, CSIF espera que la empresa tome cartas en el asunto y resuelva esta situación lo antes posible. Además, la central sindical requerirá a la Administración autonómica, de la que depende el centro de menores, fiscalice con más rigor la labor de esta empresa contratada para llevar a cabo el servicio de vigilancia privada.