Vecinos, voluntarios y protectoras de animales de Chiclanahan convocado una concentración frente al Ayuntamiento el próximo 29 de abril para denunciar un “absoluto incumplimiento” de la Ley de Bienestar Animal por parte de la administración local. La protesta coincidirá con el pleno ordinario de la Corporación y se celebrará a las 9.00 horas en la puerta del consistorio bajo el lema: “Únete para poner fin al maltrato animal”.
El detonante de esta movilización fue el cierre del centro de acogida de animales abandonados, clausurado tras revelarse condiciones de insalubridad y negligencia, lo que derivó en acciones penales contra sus responsables. Desde entonces, no existe ningún servicio municipal que recoja a los animales extraviados, abandonados o que quedan sin dueño tras un fallecimiento, lo que ha dejado un vacío que las autoridades no han cubierto. Así lo han manifestado protectoras como Huellas Callejeras, una de las impulsoras de la movilización.
“Es un problema de todos. Los animales son los que sufren y el ayuntamiento es el único responsable”, afirma July Torres, presidenta de esta asociación.

Ante esta situación, un grupo de voluntarios —algunos vinculados a protectoras y otros independientes— ha asumido la labor de alimentar, capturar, tratar y esterilizar a los animales comunitarios del municipio. Además, gestionan su adopción responsable, entregándolos con chip, pasaporte y certificados sanitarios. Según traslada la protectora, todas estas acciones son posibles gracias al esfuerzo económico de los voluntarios y sin ayudas públicas.
Campañas insuficientes y críticas de las protectoras
Fuentes de estas organizaciones aseguran que el Ayuntamiento intenta justificar su falta de implicación mediante “supuestas campañas de esterilización” que apenas cubren ocho intervenciones veterinarias al año por cada una de las cinco protectoras locales. “En total, cuarenta animales, cuando cada mes tratamos el doble o triple, y todo con recursos de los voluntarios”, aseguran.
Las protectoras exigen el cumplimiento efectivo de la Ley de Bienestar Animal, que obliga a los ayuntamientos a garantizar la tutela, atención veterinaria y políticas de adopción para los animales callejeros.