Los narcos que están operando en la provincia de Cádiz están cogiendo las prácticas más violentas con las que se desempeñan los capos de la droga al otro lado del Atlántico.
Como los cárteles de Colombia o México, acribillando a disparos y mutilando partes del cuerpo, así se emplearon los narcos que el lunes metieron a un hombre de origen magrebí a la fuerza en una furgoneta en Sanlúcar de Barrameda. Los hechos ocurrían a plena luz del día, con varios vecinos asistiendo desde sus casas al desenlace de este suceso de película.
Horas después, la persona secuestrada era encontrada gravemente herida, en la carretera que une Sanlúcar con Chipiona, tras ser torturada de manera brutal, en lo que los investigadores apuntan a un ajuste de cuentas entre narcos.
La víctima del secuestro ha recibido catorce disparos y la mutilación de la lengua y una oreja. Además, ha sufrido daños de consideración en las manos. En estos momentos, se encuentra en el hospital en estado grave.
Entre unas siete y ocho personas, según fuentes policiales, pudieron haber atacado al herido, al que torturaron para intentar encontrar un dinero del que la víctima podría conocer su paradero.