Una usuaria de la piscina municipal de Barbate ha denunciando en sus redes sociales el estado en el que se encuentran estas instalaciones a las que se desplaza con frecuencia. Según manifiesta, "la piscina no cumple con sus funciones".
La vecina asegura que la piscina cubierta localizada en la calle del Torre Tajo "está sucia" y el agua "está super fría", algo que también nota en las duchas. La mujer paga su cuota mensual y considera que "tengo derecho a una piscina limpia y climatizada" y pide explicaciones al responsable de estos servicios.
"Los monitores que trabajan allí son excepcionales, hacen más de lo que pueden, incluso friegan los baños", añade.
Otros vecinos asiduos se han sumado a esta queja ya que consideran que "nunca ha estado tan dejada como ahora" y plantean una posible recogida de firmas para solventar la situación.
Desde el año 2018, Tuna Sport S.L.U. es la concesionaria de estas instalaciones. El Ayuntamiento de Barbate explicó entonces que el contrato recoge que la empresa concesionaria deberá mantener de forma preventiva, correcta y normativa las instalaciones y sus anexos tanto interiores como exteriores. Además, ofrecerá atención e información al usuario y a todo el público en general sobre todos los servicios que se prestan en la Piscina Municipal. Se encargará de la limpieza de las instalaciones, y del desarrollo de cursos y programas deportivos, salvamento y socorrismo. También mantendrá la vigilancia y el control del equipamiento, y recaudará por los servicios prestados.
Según recuerda el consistorio, este complejo cuenta con dos tipos de piscinas, una de 25x12´5 metros enfocada a la enseñanza de los estilos de natación y todo aquel trabajo motor en el medio acuático sin impacto contra un superficie agresiva, en la que se estructuran grupos de nivel y edad adaptados a las necesidades del alumnado y los intereses del público en general. El otro vaso acuático es de menor profundidad y longitud (12x6 metros) en el cual se trabajan aspectos más específicos para la mayoría del colectivo de la tercera edad, se desarrollan clases de aquaeróbic y aquagym, y sesiones de relajación a una temperatura de entre 30 y 32 grados.