La Policía Local de El Puerto ha resuelto un nuevo caso de vandalismo contra el patrimonio tras identificar al autor de unas pintadas en la fachada del Colegio de Las Carmelitas. Como parte de una medida conciliadora, el responsable de los grafitis restauró la superficie afectada bajo supervisión policial.
El teniente de alcalde de Seguridad del Ayuntamiento, Jesús Garay, ha informado sobre la identificación del joven implicado, quien, tras reconocer los hechos, mostró su arrepentimiento y procedió a reparar los daños causados.
Los hechos ocurrieron el pasado 9 de enero, cuando la dirección del centro educativo notificó a la Policía Local la aparición de pintadas en una de sus fachadas tras el regreso a clases tras las vacaciones de Navidad. Las inscripciones eran de tipo "tag", una firma identificativa utilizada en el mundo del grafiti.
El oficial encargado de la investigación realizó una inspección detallada y un reportaje fotográfico de la zona afectada. Tras analizar las pintadas, observó similitudes en caligrafía y morfología, lo que indicaba que habían sido realizadas por una misma persona. Entre las inscripciones destacaba la palabra "SUZONER", interpretada como una firma representativa del autor.
A partir de un rastreo en redes sociales y de la comparación con otros grafitis de características similares, la investigación condujo a un joven de 18 años, empadronado en El Puerto de Santa María.
El oficial se trasladó a su domicilio para entrevistarse con él y confrontarlo con las pruebas recabadas. Ante la evidencia, el joven admitió su responsabilidad en los hechos y manifestó su intención de reparar los daños.
La dirección del centro educativo fue informada sobre la situación y se acordó una mediación policial. Como resultado, el pasado 8 de febrero, el joven llevó a cabo la restauración de la fachada utilizando materiales adquiridos por él mismo y bajo la supervisión de un agente de la Policía Local.
La directora del colegio expresó su satisfacción con el resultado del trabajo y con la labor de mediación de las autoridades locales. Con esta acción, se consideró el caso resuelto sin necesidad de mayores repercusiones legales.