La Consejería de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda ha iniciado este lunes un dragado de emergencia en la bocana del puerto de Conil, una actuación clave para garantizar la navegabilidad y operatividad de las instalaciones portuarias. La inversión destinada a esta intervención asciende a 605.000 euros, según ha informado el Gobierno andaluz.
Estas obras, ejecutadas a través de la Agencia Pública de Puertos de Andalucía (APPA), buscan restablecer los calados necesarios para permitir el acceso de embarcaciones, tanto del sector pesquero como del náutico-recreativo. Se trata de una intervención urgente que responde a los graves efectos de los temporales marítimos registrados el pasado mes de marzo.
El dragado de emergencia permitirá la normalización de la actividad en un puerto esencial para la economía local, vinculado especialmente a la pesca artesanal de almadraba, que genera más de ocho millones de euros anuales y emplea a más de 220 personas en la zona.
Daños causados por los temporales de marzo
Las intensas borrascas registradas en marzo, con episodios de fuertes vientos, lluvias y mar de fondo, provocaron acumulaciones de arena en las bocanas de varios puertos andaluces, especialmente en el de Conil. Tras realizar levantamientos batimétricos, Puertos de Andalucía confirmó un depósito de sedimentos que comprometía seriamente la seguridad en el acceso portuario.
Ante esta situación, la Capitanía Marítima de Cádiz estableció limitaciones a la navegación en la zona, debido al riesgo que suponía para las embarcaciones. Por ello, la Consejería declaró la intervención como obra de emergencia y puso en marcha los trabajos en cuanto las condiciones meteorológicas lo permitieron.
La draga destinada a esta actuación llegó el pasado miércoles al puerto de Barbate, que servirá de base para los trabajos. La autorización definitiva se recibió tras obtener el informe favorable del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, paso imprescindible para comenzar la intervención.
Un plan a tres años para asegurar la navegabilidad
El dragado de emergencia es solo la primera fase de un plan más amplio que contempla actuaciones de mantenimiento a medio plazo. La Junta ya había licitado un contrato valorado en 2,2 millones de euros para realizar un dragado integral en el entorno del puerto de Conil, con una planificación que abarca los años 2025, 2026 y 2027.
Este contrato permitirá garantizar la profundidad adecuada en la canal de acceso al puerto durante tres años, con un dragado inicial en 2025 y otros dos posteriores de mantenimiento. Como ya ha ocurrido en intervenciones anteriores, los sedimentos extraídos serán reutilizados para regenerar las playas cercanas.
En concreto, el material dragado será vertido en zonas como la playa de Fuente del Gallo y La Fontanilla, ubicadas al oeste de la Punta del Ronqueo, siempre que se determine que el sedimento es apto para ello. Esta práctica contribuye además a la recuperación del litoral y a la protección frente a futuros temporales.
Con esta actuación, la Junta de Andalucía reitera su compromiso con la seguridad marítima y la sostenibilidad de los puertos autonómicos, garantizando además la continuidad de actividades económicas clave para la provincia de Cádiz.