Los agentes de policía se niegan a salir a la calle. Desde el Sindicato Independiente de la Policía Local UPLBA de El Puerto han denunciado que no disponen de las mascarillas homologadas de protección, las de tipo FFP2 o superior, para poder patrullar por la ciudad de forma segura. "Nosotros somos los primeros que queremos dar ejemplo y seguridad después de que la Junta impusiera su uso obligatorio", asegura Juan José Cobos, representante del sindicato, que se encontró junto a otros trece compañeros sin este accesorio al entrar en el servicio.
Según explica, el jefe de servicio se puso en contacto con su superior, el intendente Rafael Muñoz Leonisio, para reclamarle que se les proporcionara este material necesario para trabajar en la calle. Sin embargo, el mando policial recogió del Ayuntamiento mascarillas quirúrgicas y mascarillas confeccionadas por la empresa Torrent, que, como denuncia Cobos son inapropiadas.
Desde marzo el cuerpo policial tiene a su disposición mascarillas para casos específicos que "son muy rígidas y muy aparatosas, pueden clavarse en la cara directamente y parecen como de la segunda guerra mundial , es imposible mantenerlas durante ocho horas". Y no cuentan con las FFP2 homologadas.
Los policías sostienen que estas mascarillas se encontraban en cajas de cartón abiertas dentro de un coche "no estaban desinfectadas, estaban caducadas desde marzo de 2020". Asimismo, según versa la etiqueta de este producto, "el usuario debe ser entrenado en correcto uso del equipo" ya que "un uso inadecuado puede derivar en enfermedad grave o discapacidad permanente".
Ante esta situación los agentes de la policía no podrán prestar su servicio fuera de la Jefatura "hasta que no nos proporcionen las mascarillas homologadas, por nosotros y por nuestras familias", reclaman desde el sindicato que declara haber sufrido coacción por parte de su superior.
Pese a las condiciones del material, el Jefe de la Policía mandó a dos agentes a las playas de Costa Oeste, dos a la de Valdelagrana y otros dos al centro para controlar desde la arena a todo aquel que no llevase mascarillas. "Nos han dicho que aquel que se niegue a salir, se le coja el nombre y la pistola y se vaya para su casa, y se le abre diligencia por rebelión y desacato", expresan.
Desde el sindicato destacan la desprotección con la que se han topado en su jornada laboral y exigen "las medidas que tenemos que tener ya que queremos salir a trabajar pero somos los primeros que tenemos que dar ejemplo". El Puerto estuvo todo el día de ayer desprovisto del control de los agentes, que también muestran su preocupación por no haber recibido ningun plan especial de cara a la Motorada de este fin de semana.